Baume & Mercier celebra a los talentos del mañana a través de su colección Classima

Para entender las nuevas creaciones, muchas veces es necesario mirar al pasado. Es en el año de 1830, que los hermanos Louis-Victor y Célestin Baume fundaron el negocio familiar, haciéndolo crecer gracias a la visión de Louis Victor, quien entre otros muchos logros, supo percibir el interés de las mujeres por la relojería. A principios de la década de 1920, el en ese entonces gerente de la empresa, William Baume, se unió con Paul Mercier y juntos fundaron Baume & Mercier, Genève en 1918, recibiendo rápidamente –en 1919- el mayor reconocimiento internacional de la época, el «Poinçon de Genève», marca de calidad que avala las piezas con una artesanía y calidad excepcionales.

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Paul Mercier consideraba esencial que la marca siguiera el ritmo de los tiempos y supiera adaptarse a los cambios y es esta filosofía la que ha acompañado a la marca en la creación de sus guardatiempos y colecciones.

Hoy hablaremos de Classima, y es que gracias a su lujo asequible, la colección se asocia con el primer éxito académico o profesional. Baume&Mercier Design Studio ha rediseñado la gama, que lleva un sentido de fuerza y retos, determinación y elegancia, logros y satisfacción, transformando al guarda tiempos en una pieza que corona un éxito, que marca un momento especial, es por ello que la Casa hace una invitación a grabar un mensaje especial en la parte trasera de los relojes de Classima.

Classima Men: El primer reto exitosamente cumplido

Fieles al lema de Baume&Mercier “Aceptar únicamente la perfección, solo hacer relojes de manufactura de la más alta calidad”, los nuevos modelos de la colección muestran una elegancia contemporánea y con estilo. Destinada para jóvenes graduados o nuevos ejecutivos, Classsima Men cuenta con dos versiones, en acero o dos tonos; cuenta con una caja de 40 mm de diámetro con una carátula rediseñada que alberga la fecha a las 3 horas. El centro con su decoración guilloché, que combina con las manecillas –en acero azulado o dorado- aporta el toque final para el balance visual de esta pieza. En la parte trasera cuenta con un cristal de safiro que nos permite ver el movimiento de carga automática suizo, así como la masa oscilante grabada con el emblemático “Pi”, el logo de Baume&Mercier y el símbolo de proporción áurea.

Classima Women: La primer victoria debidamente saboreada

Activas, atrevidas y talentosas… Las mujeres son increíblemente asombrosas y la marca siempre ha prestado especial atención a ellas. Los seis nuevos modelos de Classima Women, cuentan con una caja de 36.5 mm de diámetro y están disponibles en versiones de acero o dos tonos, están animados por un calibre de quarzo suizo o bien por un más tradicional movimiento mecánico de carga automática que es visible a través del cristal de safiro del fondo de la pieza. Un fino decorado guilloché de rayo de sol realza las carátulas en blanco o en madre perla, en algunos modelos con 8 diamantes montados, o con una apertura para las fases de la Luna.

ESCRITO PORRita Segura

Comunicóloga especializada en medios impresos y electrónicos. Escribir me apasiona tanto como la alta relojería con su preciso y encantador tic-tac.