Hace 40 años, IWC Schauffhausen introdujo por primera vez el calendario perpetuo en uno de sus relojes, gracias al trabajo de su maestro relojero Kurt Klaus. Desde entonces, la manufactura ubicada en el nordeste suizo se ha erigido como experta en funciones calendario. Y este año, supera los límites una vez más con su primer calendario perpetuo secular, que además de reconocer las diferentes duraciones de los meses y agregar un día adicional cada cuatro años, también considera las reglas de excepción de los años bisiestos del calendario gregoriano. Hablamos del Portugieser Eternal Calendar, cuyas características revisamos.
Casi hasta el infinito
Trasladar la irregularidad del calendario a un programa mecánico para un reloj de pulsera, continúa siendo uno de los desafíos más complejos de la Alta Relojería. El calendario gregoriano, que se utiliza hoy en casi todo el planeta, divide el año en 12 meses de 28, 30 o 31 días. Los años que son divisibles por cuatro se consideran bisiestos, lo que significa que hay que añadir un 29º día a finales de febrero.
De esta manera, resulta necesario agregar una corrección adicional para mantener el calendario sincronizado con el año solar real: solo los años múltiplos de 100 que pueden dividirse por 400 son bisiestos, todos los demás son normales. Esto significa que los años 2000 y 2400 son bisiestos, mientras que 2100, 2200 y 2300, por ejemplo, son normales.
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Sin embargo, un calendario perpetuo tradicional solo está programado para un ciclo de cuatro años, en el que tres años normales van siempre seguidos de un año bisiesto. Según su diseño, interpretará el año 2100 como un año bisiesto y necesitará una corrección. Lo mismo ocurrirá con los años 2200 y 2300. Por eso, un calendario perpetuo necesitará tres correcciones en un periodo de 400 años.
En cambio, un calendario perpetuo secular, como el Portugieser Eternal Calendar, está programado para considerar estos complejos detalles. Así, en esta nueva referencia (Ref. IW505701), un engranaje asegura que el calendario se salte automáticamente tres años bisiestos a lo largo de cuatro siglos, un acontecimiento que se producirá por primera vez en el año 2100.
Cabe destacar que esta nueva complicación calculará correctamente el año bisiesto al menos hasta el año 3999, ya que aún no se ha decidido oficialmente si el año 4000 será bisiesto o no.
Luna menguante y creciente
Otra característica de este reloj es la indicación de las fases lunares de gran precisión. Gracias a un engranaje reductor de reciente desarrollo, la indicación de fases Double Moon solo se desviará un día de la órbita lunar transcurridos 45 millones de años. Y muestra a la luna vista desde los hemisferios norte y sur.
Esto es posible gracias a dos discos superpuestos: un disco celeste con dos pequeñas aberturas circulares gira sobre un disco inferior estático con dos puntos. Con esta representación en negativo se consigue la sensación de que dos pequeñas lunas crecen o menguan.
Movimiento
El IWC Portugieser Eternal Calendar late con el nuevo calibre 52640 “maison”, que posee un sistema de cuerda Pellaton y una reserva de marcha de siete días (168 horas) en los dos barriletes. A través del fondo de la caja de cristal de zafiro tipo “caja” se puede ver el intrincado mecanismo de su movimiento, con un acabado de graneado circular y decoración Côtes de Genève. Por último, se presenta con un brazalete de piel de aligátor negra de los artesanos italianos del cuero Santoni.
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