Estimados amigos de Watches World: los invito a que se conviertan en admiradores de Arnold & Son, una marca suiza bautizada en honor de John Arnold. Este relojero británico fabricó algunos de los cronómetros marinos más precisos del siglo XVIII y fue responsable de varias innovaciones importantes. Para que tenga una idea, su prestigio era tal que Abraham-Louis Breguet montó su primer escape de tourbillon en uno de los mecanismos de Arnold. Su hijo, John Roger, también fue un destacado relojero y siguió los pasos de su padre.
Como verá, la Casa moderna crea relojes excepcionales como el UTTE, que son las siglas de Ultra-Thin Tourbillon Escapement. Y es que su movimiento A&S8200, elaborado de principio a fin en sus talleres de La Chaux-de-Fonds, mide tan solo 2.97 mm de grosor. Por ello, la caja de oro rojo de 18 quilates tiene un espesor de 8.34 mm. Así que es uno de los relojes con tourbillon más delgados que existen.
La jaula del tourbillon volante tiene un enorme diámetro de 14 mm y su impacto visual es incomparable. Esa jaula es totalmente esférica, sin superficies planas, para conseguir un efecto tridimensional. No tiene tornillos visibles más que en el regulador y se eleva fuera del mecanismo para alcanzar la misma altura que las manecillas de las horas y los minutos. Es un portento.
Lo mismo pienso de la carátula, donde hay una subesfera de horas y minutos a las 12 h. Y qué decir del mecanismo, que le garantiza una impresionante reserva de marcha de 90 horas gracias a dos barriletes. La decoración de los movimientos es otra cosa que me encanta de Arnold & Son, con Côtes de Genève rayonnantes y el puente del tourbillon completamente grabado a mano. Es una edición de 50 ejemplares que le recomiendo de todo corazón, como un admirador de Arnold & Son.
–Luis Peyrelongue–