Nuevas prestaciones para el mítico cronógrafo
En la primera mitad del siglo XX, el circuito playero de Daytona Beach fue el escenario de las competencias de motor más intrépidas del planeta, y para 1963, Rolex respondió a la necesidad de precisión de los pilotos con la creación de su modelo Cosmograph Daytona.
Precisión-Visibilidad-Escala Taquimétrica
Esta referencia buscaba colocarse en la preferencia del público aficionado a las carreras a partir de estos tres ejes fundamentales, en los que la Casa ginebrina trabajó para desarrollar una herramienta que permitía al piloto la lectura de la velocidad de un objeto en movimiento hasta los 400 kilómetros por hora, característica que permanece y ha sido fundamental en cada una de las referencias que la marca ha presentado desde entonces.
El mensaje reiterado, pero también la gran concepción del cronógrafo moderno, han situado a Rolex en el grado más alto de la certificación de cronometría automotriz, con presencia activa y patrocinio en competencias de talla internacional como: la F1, el Mundial de Resistencia (WEC), el Monterey Classic Car Week −que engloba a uno de los concursos de autos clásicos más importantes del planeta− y el Pebble Beach, entre otras colaboraciones.
2017-Daytona recibe a Oysterflex
Provisto de un brazalete Oysterflex, un material desarrollado por Rolex, los modelos de este año destacaron por una extraordinaria ejecución estética, la cual resalta por el brazalete patentado, que está compuesto por una lámina metálica superelástica sobremoldeada con elastómero negro de alto rendimiento, capaz de resistir las inclemencias climáticas y vencer el paso del tiempo y sus efectos. Añada un Oysterclasp (cierre desplegable patentado) con sistema Easylink, patentado por Rolex, el cual permite ajustar fácilmente su longitud con el fin de ofrecer una comodidad óptima en todas las situaciones.
Estética: oro in-house y look atemporal
Sí, sé que el oro no es creación de Rolex; no obstante, el método de fundición y selección es parte de la verticalización y de los procesos particulares que desarrolla la marca, que cuenta con su propia fundición, lo que le ha permitido crear aleaciones de oro de 18 quilates de la más alta calidad. Según la proporción de plata, cobre, platino o paladio, se obtienen diferentes tipos de oro de 18 quilates: amarillo, rosa o blanco.
En la cuestión estética, este año se suman tres tipos de caja (Oyster) y oros para las referencias en novedad, y sinceramente no sabría cuál me gusta más. Con una extensión de 40 mm para el diámetro de la caja, el oro amarillo y el blanco pudieran ser la opción más tradicional de acuerdo a la historia de esta leyenda; no obstante, el oro Everose brinda ese look espectacular que además permanecerá imperturbable a lo largo de los años. Todos están dotados de una configuración de carátula que exhibe tres totalizadores en la posición de las 3, 6 y 9 horas, mientras que la trotadora cobra protagonismo a partir del centro y ejecutará mediciones con precisión de octavos de segundo. Finalmente, el bisel graduado está desarrollado en Cerachrom, un material con base en cerámica de fórmula patentada por Rolex.
El motor
El célebre calibre 4130 es uno de los cronógrafos automáticos más confiables del planeta. Vibra a una frecuencia de 4 Hz y ha sido desarrollado totalmente en Casa. Como todos los movimientos Perpetual de Rolex, el 4130 tiene certificación de Cronómetro suizo por el Control Oficial Suizo de Cronómetros (COSC), y como Cronómetro Superlativo con precisión certificada bajo un rate de +2/–2 segundos de desviación diaria. El movimiento cronógrafo está equipado con una espiral Parachrom que ofrece mayor resistencia a los golpes y a las variaciones de temperatura, y evidentemente, capacidades antimagnéticas.