La importancia de la armadora de Stuttgart en el mundo del motor es indiscutible, fueron ellos quienes desarrollaron el concepto del motor boxer, pero también ellos han sido ampliamente reconocidos por su valiosa ingeniería y tecnología a favor de la evolución automotriz. La relación con la relojería nos invitaría a pensar en las más grandes manufacturas, dígase Patek Philippe, Jaeger-LeCoultre, Vacheron-Constantin, Audemars Piguet o Girard-Perregaux, pues su modelo 911 cumplió 50 años, no obstante su diseño y prestaciones continúan entregando lo mejor de la mecánica a través de ligeros y a la vez dramáticos cambios en favor de la precisión automotriz y sus prestaciones. Sigue utilizando la tracción trasera y nos presume una estética muy similar a la del primer modelo. Hoy se cuenta con tracción en las cuatro ruedas y ayudas electrónicas excepcionales, pero cuida su legado y cumple con él a cabalidad.
No obstante, cuando se habla de Porsche y la movilidad en las prestaciones añadidas, la mecánica pudiera quedarse corta para poder ofrecer lo más avanzado en las pistas de carreras, es por ello que Porsche cuenta con el Panamera Hybrid, derivado de una tecnología que conoce a la perfección y domina a cada paso que da. Porsche se mantuvo ausente de una enorme prueba de resistencia desde 1998, pero siendo el equipo con mayor número de victorias, 16, decidió darse un breve descanso, y quizá solamente lo hizo para regresar más fuerte que nunca: 919 Hybrid.
Un bólido que saca provecho de la energía, jamás la pierde ni destruye, la transforma en victorias y así se espera para la brillante carrera que tendrá como duelo principal a dos armadoras pertenecientes al Grupo VAG: Audi y Porsche.
Ahora bien, si todavía no encuentra relación entre el deporte motor, la movilidad, la tecnología y la relojería mencionaremos a Urwerk, que ha presentado el EMC (Electro Mechanical Control), lo que quiere decir, en terminología simple, control mecánico de la marca y precisión del reloj. ¿Se imagina un dispositivo externo que regule la marcha del mismo de acuerdo a la verificación del isocronismo, y además que pudiera ser ajustado por su afortunado poseedor de acuerdo a su estilo de vida? Suena complicado, y lo es, más aún porque se trata de un reloj 100 % mecánico, que puede ser manipulado a demanda a través de un sencillo ajuste sin necesidad de enviar a la manufactura. Este sistema actúa de manera similar al de un automóvil que regula el velocímetro o el tacómetro de tu deportivo descapotable, nuevas coincidencias entre relojes y motores, que a esta redacción le resultan particularmente fascinantes.
Y cómo se exhibe: indicador de precisión a demanda en (tasa delta δ) precisión que irá de -20 a + 20 segundos cada 24 horas; segundero en posición de la 1:30 por aguja; horas y minutos a las 5 h y finalmente un indicador de la reserva de marcha dispuesto a las 7:30 horas. La corona completa la experiencia visual situándose a las 6 y un grabado EMC resalta la nueva complicación desarrollada por Urwerk, pero eso no es todo, si damos vuelta a la caja, podremos observar el circuito que regula y monitorea la precisión del reloj, asimismo la dualidad de barriletes acoplados, parte del volante y una “manivela” de carga manual que remplaza dicha acción ejercida a partir de la corona.
¿Ya encontró la relación entre las ayudas electrónicas (horología híbrida) y el automóvil híbrido más impactante de los últimos años? ¿No? Seguramente es porque falta describir el proceso energético que lleva a cabo el nuevo 919 Hybrid de Porsche:
Un automóvil que decidió empezar de ceros y generar los componentes necesarios para cumplir a cabalidad con la prueba, todo ello gracias a la buena dirección de Alexander Hitzinger, Director Técnico de LMP1. El factor fundamental a tratar es la eficiencia energética por lo que se buscó la mejor relación posible entre la alimentación de energía y la energía utilizada, aspecto principal para la creación del Porsche 919 Hybrid; tanto en la aerodinámica del auto de carreras de Le Mans como en los componentes individuales de peso optimizado. No obstante, los sistemas altamente avanzados de recuperación de energía y tracción son los dos puntos destacados en este sentido. Las nuevas y revolucionarias normativas técnicas del WEC en la temporada de 2014 les dieron bastante libertad a los especialistas de Porsche. Un factor limitante de las prestaciones del auto es, principalmente, la cantidad de combustible disponible por vuelta.
El 919 genera energía para más de 4.500 km en 24 horas
Traducido a que con la cantidad de energía que el Porsche LMP1 recuperaría en la carrera de Le Mans, se podrían cubrir 4.576 km en el auto eléctrico más eficiente disponible en la actualidad en la clase de los compactos, y se lo podría llevar por los Estados Unidos de costa a costa, de Nueva York a Los Ángeles.
El sistema híbrido y, tan complejo del nuevo prototipo de Le Mans con su recuperación sumamente innovadora de la energía termodinámica de los gases de escape es único en el WEC. Básicamente, este principio usa una unidad de generador de turbina extra en lugar de lo que se denomina válvula de escape (wastegate). Normalmente, esta válvula permite que el exceso de energía proveniente de los gases de escape que no se requieren para impulsar el compressor, Porsche utiliza este exceso de energía de los gases de escape. Impulsa una segunda turbina que, a su vez, impulsa un generador de energía eléctrica. La nueva tecnología recupera energía que siempre se pierde en otros sistemas. Este uso de energía de los gases de escape convierte al Porsche 919 Hybrid en el único auto que compite que recupera energía no solamente al frenar, sino al acelerar. Ambos sistemas dirigen la energía cinética y térmica convertida en energía eléctrica nuevamente hacia una batería de iones de litio enfriada por líquido.
Calibre y movimiento del LMP1: necesita un bloque de combustión, y en el caso de Porsche éste es excepcional. El recientemente desarrollado V4 turbo con cilindrada de dos litros e inyección directa –sistema atípico para Porsche– es un ejemplo pionero de la reducción de tamaño. El motor de cuatro válvulas representa la combinación ideal de bajo peso y tamaño compacto con rigidez estructural y alta potencia de salida. Como Porsche participa en la clase de 6 MJ con el 919 Hybrid, las normas autorizan a los motores de gasolina con más de 500 hp un consumo de solo 4,78 litros por vuelta en Le Mans. Mientras más potente sea el sistema de recuperación, menos combustible debe ejecutar la labor de combustión, es decir ¡¡¡Eficiencia total!!!
Esperamos que esta dualidad entre motores y rotores con acento de siglo XXI haya sido de su agrado y entera comprensión de lo que el futuro de la relojería podría afrontar en los años venideros.