Cuando tuve la oportunidad de asistir a la manufactura de A. Lange & Söhne me sorprendió la paciencia con la que se labora, y el desarrollo de cada una de las disciplinas al grado máximo de la técnica, es decir: la perfección. En esta aseveración cobra vida la frase de Mr. Walter Lange: «La perfección no está asociada con la prisa», por lo que si usted requiere de un objeto realmente excepcional deberá esperar…
Esperar a que el artesano se inspire y ejecute el intrincado proceso de su pieza, esperar al proveedor del metal deseado para construir los componentes del mecanismo, esperar a que el esmalte seque, se fije a la carátula y adquiera la tonalidad propicia para exhibirse en una pieza de alta relojería, así definimos a la pasión que hay detrás de un instrumento que guarda y cuenta el tiempo producido en Glashütte y firmado por A. Lange & Söhne.
Para entrar en detalle debemos recuperar la historia del esmaltado en Dresde, Alemania, que data de hace más de 3,500 años gracias a la predilección que Augusto El Fuerte, Elector de Sajonia, poseía por las artes. Así pues, el joyero de la corte de nombre Johann Melchior Dinglinger, generó piezas preciosas gracias al esmalte, mismas que pueden ser observadas en la exposición de la Bóveda Verde del Castillo de Dresde.
PASO A PASO:
1.- El esmalte en su materia prima es un tipo de cristal que debe ser reducido a fragmentos microscópicos a fin de no generar impurezas sobre la superficie a la que se aplicará, en este caso a la carátula. A estos cristales se les aplasta con un mortero y un líquido especial, a fin de poderle utilizar gracias a un pincel.
2.- Se aplica también una capa de esmalte en la parte trasera, a fin de prevenir la distorsión de la cara principal.
3.- Se rellenan los bordes, pues la carátula posee tridimensionalidad que debe recibir especial atención entre las letras «A.Lange & Söhne», por ejemplo, y su unión a la carátula.
4.- Se aplica el esmalte en la carátula de manera uniforme, al tiempo que la pieza es sometida a varios procesos dentro de un horno especial, con el propósito de fijar el color a la superficie.
5.- Durante estos procesos, el esmalte en polvo se recupera en un contenedor de papel aluminio, a fin de no desperdiciar materia.
6.- Al término de cada proceso de cocción, la carátula se enfría lentamente sobre un soporte. Mientras que una vez seca y limpia, la operación puede ser repetida a fin de asegurar el terminado.
7.- Con el propósito de solidificar el tono de la carátula, se aplican varias capas de esmalte para conseguir el color negro (en esta ocasión), lo cual se logra con esmaltes azul brillante.
8.- Se pulen los bordes.
Finalmente debemos destacar que éste es solo uno de los procesos para la creación de la carátula del Lange 1 Tourbillon Handewerkskunst, por lo que podrá admirar no solamente la mecánica, sino también el escenario cargado de historia que tiene a bien exhibir las informaciones posibilitadas por el movimiento.