A partir de este año, y durante los siguientes cinco, Montblanc se convierte en Socio Cronometrador Oficial de las emociones y competencias que conviven en uno de los escenarios automotrices de mayor importancia a nivel internacional: Goodwood.
Cada verano, este festival de velocidad es llevado a cabo justo en la comunidad de Goodwood y, edición tras edición, mejora con respecto a la anterior.
¿Qué es el Goodwood Festival of Speed?
Un evento tan selecto como emocionante e histórico, el cual se realiza de manera anual en los terrenos de Goodwood House, West Sussex Inglaterra, en los meses de junio o julio, siempre evitando empatar en fechas con el calendario de la Fórmula 1. En esta ocasión, se llevará a cabo del 29 de junio al 2 de julio.
Montblanc y la velocidad
Este año la legitimidad de una de sus dos manufacturas: Villeret-Minerva, permitió a Montblanc recuperar esa pasión por medir la velocidad. Y siendo el tema central del año la competencia automotriz a partir de los cronógrafos de principios de siglo XX desarrollados por Minerva, la firma renovó su colección TimeWalker y la enfocó en revivir la esencia de la cronometría automotriz con sus instrumentos de precisión.
Instrumentos de precisión
El cronógrafo ha sido una de las complicaciones más populares desde sus inicios, y se ha convertido en algo más que un dispositivo mecánico de cronometraje: en un instrumento que hace cumplir el código de juego limpio y deportividad, erigiéndose en testigo y juez de casi todos los tipos de competiciones deportivas. De todos los deportes de motor, las carreras de automóviles son las que siempre han tenido un vínculo más estrecho con el cronógrafo. Las historias de la conducción de competición y el cronometraje de rendimiento son tan inseparables, que una no podría existir sin la otra. Con la capacidad de capturar y registrar el tiempo para la eternidad, el cronógrafo ha sido testigo de algunos de los momentos más importantes del deporte automovilístico.
A medida que el automovilismo evolucionó durante los siglos XX y XXI, el cronógrafo se convirtió en un símbolo de competición justa y en el recordatorio fundamental de que la victoria solo puede ser declarada por resultados de tiempos reales y precisos.
Fundada en 1858 en Villeret, en el Valle de Saint-Imier, Minerva ha sido una destacada especialista en la fabricación de relojes profesionales. Desde 1908, ha llevado a cabo con éxito nuevos desafíos tecnológicos, como la producción de relojes equipados con funciones de cronógrafo y cronómetros altamente precisos que miden intervalos cortos de tiempo. La Manufactura desarrolló desde 1911 cronómetros que podían medir un quinto de segundo, aumentando rápidamente a una décima de segundo. Con este espíritu innovador, en 1916, la Manufactura Minerva fue una de las primeras en producir un movimiento de alta frecuencia que pudiera medir una centésima de segundo, desarrollo que se perfeccionó técnicamente en 1936, poniendo a Minerva en el mapa como especialista en relojes profesionales y cronómetros.
La nueva colección TimeWalker de Montblanc combina estos legendarios instrumentos de cronometraje con el espíritu de las carreras automovilísticas, condensando el patrimonio de Minerva: magnífica tecnología, energía masculina, máximo rendimiento y el estilo de los días de gloria de las carreras.
Colección Montblanc TimeWalker 2017
“Goodwood ha sido la celebración más importante de las tradiciones y logros de las carreras automovilísticas durante el siglo pasado, mientras que el patrimonio relojero de Montblanc está estrechamente ligado a los cronógrafos utilizados durante los días de gloria del automovilismo. El Festival Goodwood de Velocidad es la plataforma perfecta para presentar nuestra nueva colección TimeWalker, ya que esta asociación reúne, por un lado, la ambición de empujar las fronteras en el ámbito del rendimiento del automóvil y las carreras y por otro, la innovación en el campo de la ejecución del tiempo”: Nicolas Baretzki, CEO de Montblanc.
Hablamos de atracciones que abarcan un fin de semana, dentro del cual forman parte de 100,000 a 150,000 personas, con récords de hasta 158,000 asistentes. El festival comprende una emblemática prueba de ascenso a contrarreloj, cuya distancia es de 1.86 kilómetros, pero además se incluyen eventos de rally, drifting, atracciones especiales, series de superdeportivos y automóviles históricos, entre otros.
Fundado en 1993, lo inaugura por Lord March −aristócrata británico heredero del duque de Richmond−, motivado por devolver a Goodwood la historia legítima de competencias de velocidad británica. Se tienen contempladas estas diferentes pruebas:
Hill Climb (asenso): un evento cuya finalidad no es batir los récords año con año. Cuenta con el emblemático asenso que, en 1999, Nick Heidfield logró completar en tan solo 41.6 segundos a bordo de su McLaren MP4/13 de Fórmula 1, mientras que se tienen registros no oficiales de que Heikki Kovalainen lo recorrió por debajo de los 40 segundos. Son 1.16 millas de ascenso, y muchos de los mejores pilotos buscan completar la hazaña de sumarse a los récords de Goodwood.
Soapbox Challenge (descenso): es una competencia que tiene como comparsa a la gravedad, y que se corre en sentido inverso a la competición de ascenso. Fue puesta en pausa en 2005
Forest Rally Stage: con automóviles de rally, se comenzó a correr a partir de 2005, y se ejecutan maniobras de gran atractivo.
The Sculpture (muestra): generalmente para bólidos históricos, la velocidad no es lo más importante.
Supercar Run: desde el año 2000, se corre con superautos a contrarreloj. Esperaremos a ver quién domina en esta etapa este año.
Cartier Style et Luxe (gala): por invitación para las mejores piezas del festival, comparado con lo que puede ser Pebble Beach o Concours d´Elegance.
TheMoving Motor Show: es un evento enfocado en la venta y prueba de vehículos, se utiliza para llevar superdeportivos o automóviles exóticos. No se lleva a cabo todos los años, pero sí se contempla la participación de las armadoras de acuerdo a sus presupuestos y proyectos.
Finalmente se llevan a cabo exhibiciones aéreas a cargo de aeroplanos históricos o novedosos, pues se trata de crear un ambiente lleno de velocidad y motores.
