Bulgari nos embarca en un viaje a través de la vivacidad y la belleza de las piedras preciosas de color en el tercer capítulo de la saga Color Journeys.
Ya nos cautivó con la turmalina paraiba y la espinela en las dos primeras entregas de la serie, ahora lo hace con dos piedras preciosas igualmente fascinantes: la kunzita (Brasil) y la morganita (Madagascar y Mazambique).
Descubiertas por el mineralogista estadounidense G.F. Kunz en el siglo XX, ambas gemas inspiraron a Bulgari para crear impresionantes composiciones de color.
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La originalidad de las creaciones radica en que estas piedras preciosas son hasta cierto punto desconocidas en el mundo de la Alta Joyería. Bulgari las retoma y les aplica su incomparable savoir-faire en el campo de las piedras de color creando piezas que juegan con una sutil paleta de tonos pastel. En ellas se aprecian los matices casi púrpuras de la kunzita y las suaves tonalidades rosadas de la morganita. Juntas recrean la delicada atmósfera y encantadora belleza de una primavera mediterránea.
¿Cómo está compuesta la colección Color Journeys?
Bulgari ha desarrollado 50 diferentes creaciones para este capítulo de Color Journeys. Las combinaciones cromáticas logradas con la kunzita y la morganita son vivas, brillantes e impactantes.
Comienza el recorrido con el collar de Alta Joyería Sweet Prism, la caleidoscópica composición de gemas recuerda la evocadora imagen de un prisma que refracta la luz para ofrecer bellas perspectivas siempre cambiantes. Engastadas en oro rosa de 18 quilates, cinco kunzitas ovaladas dialogan con cuatro morganitas ovaladas, mientras que brillantes elementos de turquesa animan la creación con acentos mediterráneos.
El precioso brillo de casi 30 quilates de diamantes realza aún más la vibrante combinación de colores del collar, así como su excitante mezcla de cortes y formas.
Un collar de ensueño
El viaje sigue con el collar Dreamweaver Divas’ Dream, una interpretación del emblemático motivo en forma de abanico. En el centro del colgante, luce una magnífica morganita ovalada de 10.20 quilates que se eleva sobre un sublime entrelazamiento de inserciones de madreperla, rubelitas y diamantes, un juego dinámico que también se extiende a las fluidas líneas de la cadena de oro rosa de 18 quilates. En esta pieza el flujo de gemas de color rosa se ve realzado por dos espinelas redondas facetadas, que contrastan con elegancia los tonos suaves y soñadores de la morganita con sus matices profundos e intensos.
Otro de los destinos de este viaje es el collar Midnight Riviera de oro rosa de 18 quilates evoca los impresionantes colores de una noche mágica a orillas del mar italiano. Jugando con una paleta mediterránea impregnada de toques neón contemporáneos, la creación combina cinco kunzitas corte cojín con cuatro tanzanitas corte cojín en un conjunto armonioso. El contraste lo da el azul profundo de la tanzanita que realza magníficamente los matices violáceos de la kunzita.
Serpenti Misteriosi Pallini digno integrante de Color Journeys
Finalmente en este recorrido no podía faltar el legendario icono Serpenti que este año celebra su 75 aniversario. En esta ocasión experimenta una nueva metamorfosis con piedras preciosas exquisitas. Inspirándose en un emblemático reloj del Heritage de Bulgari de 1955, el Serpenti Misteriosi Pallini luce un cuerpo flexible de cuentas móviles de oro rosa de 18 quilates, así como zafiros púrpuras, turmalinas rosas, granates mandarina, espinelas rosas y diamantes, todo engastado en temblones que garantizan un cautivador sentido de movimiento.
Totalmente incrustada de diamantes redondos corte brillante, la cabeza del reloj está coronada por una morganita en forma de pera de 5.45 quilates que aporta su matiz melocotón a esta evocadora paleta de piedras preciosas que recuerda una puesta de sol sobre el Mediterráneo.
Esta obra maestra de la artesanía requirió 510 horas de trabajo para completarse, este reloj en espiral funciona con el movimiento mecánico Piccolissimo, el más pequeño de Bulgari.