Quien recorre Masaryk, la avenida del lujo por excelencia en la ciudad de México, puede dar testimonio de innumerables anécdotas, la de hoy sucedió frente a Berger Joyeros cuando Mark Webber, el famoso piloto y embajador de Chopard, llegó conduciendo un Porsche y se estacionó frente a la famosa joyerÃa. Ãl serÃa el encargado, junto a Rudolf Lang, Director de Chopard para Latinoamérica y México, asà como don Mauricio y Ari Berger, de reinaugurar la flagship store de la marca luego de haber sido ampliada y totalmente renovada de acuerdo con el nuevo concepto global de la marca.
La Casa Chopard puso en marcha la incorporación de un nuevo concepto de decoración para sus boutiques, creado por el arquitecto franceés Thierry W. Despont, iniciando la transformación con la ubicada en Madison Avenue, ahora fue el turno de la ubicada dentro de las instalaciones de Berger Joyeros de lucir una nueva cara a lo largo de sus 48 m2 donde las emblemáticas piezas joyeras y relojeras lucen simplemente espectaculares.
Pudimos comprobar el cálido y acogedor ambiente que brindan los tonos claros de la madera (roble blanco), las pieles, la seda y el terciopelo, todos, elementos que al combinarse recrean a las antiguas boutiques pero que al mismo tiempo reflejan un aire moderno y vanguardista. Es un espacio Ãntimo que permite a los clientes disfrutar de cada una de las piezas en exhibición.
Embajador de excepción
Ya les hemos hablado en repetidas ocasiones del poderoso lazo que une a las marcas de lujo con las personalidades más variadas del deporte o del mundo del espectáculo, para que éste se dé es fundamental que compartan ideales o filosofÃas, y este es el caso de Webber y Chopard, una Manufactura que se ha destacado por su vÃnculo con el mundo motor y la velocidad, prueba de ello es la colección Superfast. Esta unión refuerza la asociación con Porsche Motorsport, equipo que Chopard patrocina y cronometra, y en el que Webber corre.
A continuación algunos de los momentos vividos durante este evento.