En el sentido estricto de la palabra, cada reloj es un mundo, es decir, por mínima que sea la diferencia, la belleza e individualidad de cada pieza es inherente al trabajo desarrollado por los artesanos y relojeros, es arte.
Así lo entendemos quienes nos dedicamos a promover la horología como algo más que un instrumento diseñado para medir, contar y guardar el tiempo, y más aún cuando nos referimos a Jaquet Droz. Sus autómatas y mecánicas de alta estirpe del siglo XVIII inspiran a las nuevas generaciones de horlogers que laboran en su Manufactura a más de 200 años de separación con las creaciones de fundador Pierre Jaquet Droz, un genio comprometido con el desarrollo de la mecánica en homenaje a la naturaleza.
Este 2015, Jaquet Droz se liga a Only Watch, iniciativa sugerida en primera instancia por el Príncipe Alberto II de Mónaco, y que ha encontrado –por sexta ocasión– una respuesta magnífica por parte de la industria relojera, que se vuelca a favor de la investigación de una enfermedad que al día de hoy resulta incurable: Distrofia Muscular Progresiva, también conocida como Distrofia Muscular de Duchenne.
El evento bienal se llevará a cabo este próximo 23 de septiembre en el Salón Náutico de Mónaco Mientras que el Only Watch Petite Heure Minute Paillonnée, viajará a Asia, Europa y América previo a ser presentado en la subasta de Ginebra el sábado 7 de noviembre. Cabe destacar, que el total de lo recaudado será entregado a beneficio de la Asociación encabezada por el Príncipe Alberto II de Mónaco.
La pieza:
El arte del esmaltado paillonné proviene del Renacimiento consiste en crear un motivo conformado por pequeñas piezas de oro aplicadas con gran destreza sobre una superficie, en este caso la carátula del reloj. Dicha orfebrería se lleva a cabo al interior de los Ateliers d´Art en La Chaux –de– Fonds, sitio en el que se asienta la manufactura de al Casa.
Transmitido de los orfebres del Renacimiento, esmaltado paillonné consiste en crear un motivo planteado utilizando pequeñas piezas de pan de oro, aplicadas una a una con gran destreza. A esto se une entonces el arte del esmaltado para obtener tanto los colores requeridos y la profundidad traslúcida del esmalte, a fin de exhibir un ligero rayos de Sol en el dial.
Asimismo, es la primera ocasión que Jaquet Droz combina el esmaltado paillonné, y le exhibe en una caja de 43 mm de oro amarillo a fin de garantizar su contraste con el esmalte gran fuego de la carátula de la pieza, que exhibe a las horas y minutos descentrados mediante una subcarátula en posición de las 12 horas.
Finalmente, la mecánica del movimiento destaca por su espiral de silicio, que le entrega prestaciones antimagnéticas y eleva su resistencia a los choques y variaciones de temperatura o presión, garantizando su estabilidad y marcha, mientras que dicho calibre se puede admirar a través del bellísimo fondo de cristal de zafiro que aparece grabado con la leyenda: «unique piece Only Watch 2015».