En un año en el cual la relojería no atraviesa por su mejor momento, debemos apuntar que las grandes marcas siempre salen a flote por la robustez de su estructura, porque por algo han estado presentes por más de 100 años, porque Longines es una firma seria, comprometida con su clientela y que ha superado cualquier clase de tormentas…
Evidentemente el lanzamiento del año para la marca nos lleva a la precisión del cuarzo, pero no de cualquier cuarzo, uno que pone el listón tan alto en términos de precisión que pocos lo veían arribar. Conquest V.H.P., recibe un espacio adicional en estas líneas, por lo que le invitamos a visitar más de esta información, AQUÍ.
Record, el silicio llega a Longines
Con la evolución de la técnica y la innovación de materiales, este reloj cuenta con certificación de cronometría por el COSC, además de estar regulado por mecanismos que poseen una espiral de silicio, a fin de conseguir más precisión y longevidad. Un material resistente, ligero, inoxidable, insensible a los cambios de temperatura usuales, a los campos magnéticos y a la presión atmosférica. ¡Un corazón high-tech alojado en un reloj elaborado en la más pura tradición relojera!
Record se lanza este año como una nueva colección, sumamente clásica y deaarrollada en diferentes tallas: 26, 30, 38.5 y 40 mm, con dos referencias adicionales engastadas con diamantes en los dos primeros casos. Al interior de los relojes más “delicados” late un calibre L592.4 con certificación COSC y 40 horas de autonomía a 4 Hz, mientras que en las referencias más robustas –para hombre– se alberga el motor L.888.4 certificado por COSC, pero con una autonomía de 64 horas a 3.5 Hz (25.200 a/h).
Flagship Heritage 60 Anniversary
En mi experiencia personal puedo asegurar que este 2017 es el mejor año, más variado y más enfocado a lo que la gente quiere ver de la marca y, en celebración a su 185 aniversario hemos visto lo que Heritage 60 Anniversary ha hecho por la firma, llevándonos hasta los orígenes de su producto con una pieza Flagship en homenaje a la original de 1957. Disponibles en acero, oro amarillo u oro rosa, estos modelos se comercializan en una serie limitada y numerada y con su medallón distintivo, que representa una carabela, grabado en el fondo de la caja, al igual que los modelos originales. La extensión de su caja de 38.5 mm es ideal para ajustarse a la muñeca, mientras que las piezas exclusivas, las versiones de oro se presentan en una edición limitada de 60 unidades, mientras que la versión de acero cuenta con 1957 unidades. La esfera plateada cepillada está adornada con 8 índices y 4 números árabes de color oro amarillo u oro rosa. Al igual que los modelos originales, el fondo de estos relojes conmemorativos está decorado con un grabado que representa una carabela, el flagship. Una correa de piel de color marrón complementa esta pieza de excepción.
Symphonette
La evolución de la línea desvelada hace un par de años ha respondido a lo que las musas quieren hoy en día de su reloj. Con brazalete entramado y carátulas distinguidas, Symphonette tiene una combinación que seguramente será del agrado de las doncellas atemporales y femeninas.
Longines presenta nuevas variaciones, de diseño moderno y audaz, mezclando oro rosa y acero. La corona de oro rosa macizo, así como los matices rosados de la carátula, hacen juego con el entramado de acero y capas de oro rosa del brazalete. El brillo del acero, del oro y de los diamantes realza el refinamiento de las esferas, mientras las pulseras finamente elaboradas añaden un toque final al conjunto. En cuanto a extensión se liberan dos tallas: S y M, con cajas ovaladas de acero y acero engastado, destacan sus diales embellecidos con diamantes, o bellísimo nácar o textura flinqué.
Lindberg Hour Angle Watch 90 Anniversary
El primer vuelo trasatlántico en solitario y sin escalas lo llevó a cabo Charles Lindberg, y lo cronometró Longines. Así se simple y complejo es este verdadero momento histórico para la humanidad, y en cuestión relojera, un antes y después de las hazañas conseguidas por la firma de Saint Imier.
Todo sucedió un 20 de mayo de 1927, cuando en punto de las 7 h 52, cuando el “Spirit of St. Louis” despegó del aeropuerto Roosevelt con destino al aeropuerto de Le Bourget, cerca de París. Al mando, un joven piloto estadounidense llamado Charles A. Lindbergh. Treinta y tres horas y media más tarde, aterrizó en el aeropuerto de Le Bourget, tras el primer vuelo transatlántico sin escalas en solitario. Una hazaña que haría historia. Como Cronometrador Oficial de la Federación Aeronáutica Internacional, Longines también participó en la homologación de esta proeza al cronometrar el vuelo y luego al agregarlo a la lista de los records aéreos.
Longines conmemora hoy el 90° aniversario de la hazaña de Charles Lindbergh y de su cronometraje con una reedición de este legendario reloj, producida en una serie numerada y limitada de 90 ejemplares: The Lindbergh Hour Angle Watch 90th Anniversary. Tan impresionante como la pieza original, este modelo de 47,5 mm de diámetro -tamaño que facilitaba su lectura y su manipulación en la oscuridad y las vibraciones de los aviones de la época– no dejará de llamar la atención en las muñecas de los aventureros de hoy en día. Provisto de un bisel giratorio que permite la corrección de la ecuación del tiempo y de una carátula central giratoria para la sincronización al segundo exacto, este reloj indica, además de las horas, minutos y segundos, el ángulo horario en grados y minutos de arco. Finalmente, se abraza a la muñeca mediante una correa de piel de color marrón estilo aviador con extensión para fijar el reloj incluso sobre una chaqueta de piloto. No sabemos cuántas llegan a México, pero sin lugar a dudas las que sean estarán vendidas previo a su llegada.
Longines Heritage 1945
Inspirado en este año, muy bélico por cierto, los tonos beige y cobrizos están jugando un papel sumamente seductor en las tendencias relojeras actuales, por lo que lo vintage es el futuro, y el pasado es traído a nuestro tiempo con toda la tecnología disponible. Longines se inspira de tanto en tanto en la riqueza de sus numerosas colecciones de antaño. El reloj The Longines Heritage 1945 se inscribe en este deseo de reeditar piezas cuyo diseño elegante supo perdurar al paso del tiempo gracias a su estilo atemporal. Va dirigido a quienes desean lucir un reloj de líneas puras y de estética que enamora. Provisto de un calibre 12.68Z de remonte manual, la experiencia se complementa por esa cualidad de poder dar vida a tu reloj desde la corona.
The Longines Master Collection
A principios de este siglo la marca lanzó un icono inmediato a partir de esta Master Collection, no obstante la evolución de la misma determina un cambio de look a partir del color en las nuevas carátulas gris y azul, las cuales añaden un toque mucho más elegante y/o deportivo a la referencia que puede ser portada en cualquier momento, con jeans, traje, de día y de noche…
Pero no hay que dejar fuera al público femenino que ama esta colección y que seguramente también deseará contar con una opción para vestir su muñeca. Por lo que tallas de 29 mm estarán disponibles para ella, y para nosotros serán robustos 40 mm de diámetro. Los movimientos corresponden a los calibres: L592.2 de 40 horas de autonomía a 4 Hz para los relojes de mujer, y al L888.2 de 64 horas de autonomía y 25,200 a/h para los modelos de caballero. Ambos “motores” darán vida a las: horas, minutos y segundos con fechador, mientras que las carátulas gozan de números romanos para la carátula gris e índices aplicados en los diales azules.
The Longines RailRoad Pocket Watch
La cereza del pastel es un reloj de bolsillo inspirado en la experiencia de la marca en el servicio de cronometría para los ferrocarriles, que debían ajustarse a un sistema de precisión sumamente exigente, toda vez que un mal cambio, una mala salida o un desperfecto podría terminar en tragedia.
En este sentido Longines tomó el reto hace muchos años, dotando a países como Rumania, Serbia, Persia, Italia, Chile, Canadá, Estados Unidos, Turquía y China, entre otros, de sus relojes desarrollados entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Su estructura es una caja de acero inoxidable de 49.5 mm de diámetro, la cual alberga al calibre manual L513.2 desarrollado en exclusiva para Longines. Su estética también se remite a los códigos originales: números romanos en contraste total con la carátula, y una minutería de ferrocarril posibilita la lectura del tiempo mediante agujas de acero azulado, el segundero destaca en punto de las 6 horas.