Lykan HiperSport, el automóvil más caro del mundo (3.4 millones de dólares), fabricado por la armadora libanesa W Motors, fue presentado en el salón de Qatar 2013; por razones obvias, tenemos que cuestionarnos, ¿qué elementos se combinan para que el también primer superauto árabe sea tan exclusivo? y Cyrus, nos lo explica…
La respuesta está en su avanzado diseño, tecnología y nivel de opulencia; cuenta con iluminación delantera tipo LED e incrustaciones de diamantes, además de entregar 750 caballos de potencia, parar el cronógrafo en 2.8 segundos en la prueba de 0 a 100 km/h, y alcanzar una velocidad máxima de ¡385 kilómetros por hora!
Hablando de tiempos y distancias surge otra interrogante, naturalmente y por definición del concepto, la velocidad es una magnitud física «ritmo o tasa de cambio de posición por unidad de tiempo». Habiendo dicho lo anterior y regresando a la asociación que estoy por compartirle, amigo cibernauta, ¿qué elementos debía de cumplir un contador de tiempo para asociarse con el vehículo automotor más exclusivo del planeta? y ¿por qué se escogió a Cyrus como socio? a pesar de la demanda tan amplia de otras casas relojeras por ligarse al Lykan HiperSport.
La leyenda dice que el hombre lobo solamente se transforma en Luna llena, es así que W Motors optó por asociarse a la marca Cyrus, cuyo reloj Klepcys fue uno de los primeros -en el mundo- en realizar una Luna de tres dimensiones visible en la carátula.
W Motors ha encontrado en Cyrus al socio ideal, cuyo Klepcys está vinculado en su totalidad con la historia y el concepto de esta marca, un elemento interesante pues sugiere que las marcas independientes tienen la capacidad de convivir cada reforzar su legitimidad, compartiendo una visión común. Tal es el caso de los relojes manufactura, así como el Lykan HyperCar, del cual únicamente se producirán siete vehículos hechos a mano de fabricación italiana a partir de fibra de carbono dispuesta en capas. El corazón del superauto funciona con tecnología alemana (altamente reconocida a nivel mundial por su capacidad técnica). Su motor -totalmente hecho a mano, pieza por pieza- ha sido ensamblado en el país teutón para garantizar el alto desempeño propuesto por W Motors: doble turbo para un motor de seis cilindros y un total de 750 caballos de fuerza y 980 N/m, lo que resulta en un 0 a 100 km / h en menos de 2,8 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 385 km / hora.
Tal vehículo es, por supuesto, totalmente personalizable, el cliente puede elegir entre una variedad de piedras preciosas que se añaden tanto al interior como al exterior del coche: diamantes, rubíes, zafiros, esmeraldas, al igual que los mejores materiales (como el oro o el platino) dispuestos para el uso en el interior de los vehículos, y por si fuera poco, un servicio de concierge -vinculado al coche- está disponible para usted las 24 horas del día, independientemente de sus necesidades.
El Hypersport Lykan es la Hypercar tecnológicamente más avanzado de su clase. Es el primer coche del mundo con una pantalla holográfica plenamente funcional con el movimiento interactivo. Funciones interactivas le permiten seleccionar a través del movimiento de su mano en el aire, empleando el dedo como puntero. Una pantalla de proyección pasiva se convierte así en una gran pantalla táctil interactiva cuyos usos potenciales son muy variados. El usuario puede interactuar directamente con el holograma. A diferencia de otros sistemas actualmente en desarrollo no existe ninguna barrera entre el usuario y el holograma permitiendo así una simbiosis total.
Cuenta la leyenda que un lobo adoptó al Rey Cyrus cuando éste fue abandonado en el bosque por su abuelo, se dice -entonces- que Cyrus adquirió su fuerza física y mental del mítico animal. Una vez más nos damos cuenta de que la intención detrás de la creación de una nueva marca es vincular constantemente el producto a su nombre. Una inspección detallada de la HyperSport revela que los dos extremos del cofre se extienden a lo largo de los lados del parabrisas, como las dos orejas de un lobo, una característica única en el diseño automotriz. Visto de frente, el HyperSport se asemeja a un lobo salvaje listo para transformarse en hombre lobo, y al arrancar el motor no hay marcha atrás…