Las piezas de relojería no solo abarcan el movimiento y las indicaciones que el guardatiempo podrá exhibir en su carátula, sino toda una extensión de la personalidad de cada uno de sus portadores, y es por ello que Linde Werdelin nace, bajo una idea de generar un estilo de vida deportivo, diferente y que aporte mucho más que sus funciones.
Linde Werdelin pensó en un sistema intercambiable de brazaletes para un mismo reloj, que consta de dos «straps» que transforman la actitud y personalidad de la pieza en tres sencillos pasos: desatornillar con una herramienta especial la correa que se tiene (caucho o cuero forrado de textil de alta resistencia), incorporar la segunda correa y atornillar desde la caja misma.
La innovación no siempre tiene que obedecer al desarrollo de una idea difícil de desarrollar, puede volver a las bases y cumplir de manera perfecta su cometido.