La Alta Relojería está ampliamente dominada por las grandes marcas y principales Grupos de lujo a nivel internacional, no obstante existe innovación y creatividad que bien vale la pena considerar.
Este año acudieron a México cinco marcas independientes que destacaron por su fresca propuesta y/o excelencia artesanal tradicional, las cuales levantan la mano para poder alojarse en algún punto de venta de nuestro país.
¿Por qué no están en México?
Si bien México cuenta con una amplísima red comercial y de distribución enfocada a dar servicio a la industria de la Alta Relojería, también es cierto que año con año los puntos de distribución reciben innumerables ofertas de Casas independientes para que les ayuden a comercializar sus productos.
Esta decisión, que un distribuidor tome la marca y la acerque a puntos de venta, no es sencilla. Ya que los grandes grupos buscan el respeto de sus socios comerciales históricos y cada vez más desean exhibir un amplio portafolio de sus referencias y múltiples firmas asociadas, según el caso.
Esto deja muy poco margen de maniobra para el distribuidor que, con la razón que merece su negocio y operación, se concentra en corresponder al apoyo en términos de inversión en publicidad y marketing para la movilización de los inventarios y la rotación de los mismos.
Como en toda industria se debe procurar el pago de una instalación y la seguridad de la misma, la capacitación del personal, la garantía al cliente y muchos factores adicionales para que la relación funcione. La clientela –por su parte– también demanda piezas en específico que notó en los medios de comunicación o en espacios como internet, coberturas que son provocadas por historias de valor o por el mismo peso específico de la marca y las presentaciones globales de las que participa.
El servicio, confianza y trayectoria son fundamentales ante una compra de un bien por el precio que se paga, es por ello que el cliente también debe ser cauto al momento de tomar una decisión. Sin embargo existen independientes que se ocupan de todos estos temas y podrían merecer una buena oportunidad en un mercado tan apasionado por la relojería que propone algo diferente.
Watches World ha tomado con seriedad la propuesta y análisis de 5 nuevos participantes que asistieron a México en busca de oportunidades. A continuación, uno a uno y por orden alfabético.
Gorilla
Hace un par de años Octavio García, otrora diseñador en jefe de Audemars Piguet fundó, junto con su socio Lukas Gopp, su propia marca relojera. Lejos del acercamiento tradicional que encabezó durante sus años con la respetada AP, Octavio decidió enfocarse en un nicho de mercado más juvenil y con deseos de mirar al futuro como aliado.
Su conocimiento de la industria lo llevó a ubicar su marca en Neuchâtel, y a establecer un convenio comercial con Miyota para la proveeduría de calibres mecánicos automáticos. Sin ser una marca Swis Made, ofrece una gran calidad de acabados en sus relojes y su producción continuará ascendiendo con el paso de los años y la reinversión de los recursos.
Sus relojes llevan por nombre Fastback, GT, RS y Drift. Es decir, la inspiración estética y el empleo de materiales deriva de los muscle cars y de los bólidos americanos. Ya que Octavio nace en Chicago hijo de padres mexicanos, y en sus años de infancia se aficionó por los autos y la industria automotriz. En los primeros casos inicia con cajas de 44 x 48 mm y los dota de los calibres nipones conocidos por su fiabilidad, un gran acierto ya que dichos movimientos sugieren poca logística de mantenimiento.
En el caso particular de Drift, se trata de una maquinaria ETA 2824-2 como base, pero dotada de un módulo hecho por Vaucher Manufacture Fleurier (G-5238), que mucho me recuerda a una especie de visualización característica de Urwerk, guardando absoluta distancia y proporción. Y he aquí lo atractivo, ya que los acabados y la unión de materiales como la cerámica, el carbono y el titanio sugerirían un precio muy elevado, pero no.
La marca arrancaría, de comercializarse en México, alrededor de los 35 mil pesos, y escalaría a poco menos de 70 mil por un reloj que ha sido nominado al Grand Prix d´Horlogerie de Genève. Hoy por hoy sus mercados más importantes son Singapur y Japón, en este orden, pero se espera que crezca de manera acelerada y alcance a México en algún punto.
Laurent Ferrier
Relojero maestro para Patek Philippe por más de tres décadas y apasionado corredor de autos, terminó tercero en las 24 Horas de Le Mans de 1979 y ahí conoció a su socio François Sérvain. Juntos, en 2010 fundaron la manufactura que hoy se encuentra muy cerca del edificio principal de su alma máter, en la dirección de Plan-les-Ouates, Ginebra.
En la filosofía más pura de la relojería tradicional, la marca ha producido poco más de 800 relojes desde que abrió sus puertas. Todos caracterizados por un increíble nivel de acabado y detalle, además de estar acentuados por características clásicas de un Patek Philippe, como la visión de mostrar sus torbellinos desde el fondo.
Su colección lleva por nombre Galet, y de aquí se desprenden múltiples y exquisitas complicaciones como: repetidores de minutos, un tourbillon con doble espiral, un calendario anual de fácil ajuste, un reloj para viajero con indicación digital y hasta un automático con micro-rotor y dotado de un escape natural*. Las colaboraciones que ha tenido la marca le han llevado a trazar caminos conjuntos con Urwerk y el gran Felix Baumgartner, y sabemos que no será la última.
Particularmente el detalle trabajado a mano en cada centímetro del reloj ha sido reconocido por periodistas internacionales dedicados a esta materia, y un claro ejemplo de ello son sus agujas volumétricas curveadas, un trabajo que muy pocos dominan o tienen la intención en tiempo para dedicarle.
*El échappement naturel fue desarrollado por Abraham-Louis Breguet, quien buscó desarrollar esta mejor solución debido a conseguir una mínima interferencia con el equilibrio durante el desbloqueo y el impulso, además de no requerir de lubricación. Fue desechado por muchos años debido a que no se tenían las herramientas para poderle producir y miniaturizar durante la época. La relojería contemporánea tradicional emplea, en su mayoría, un escape de áncora suizo.
Le Rhône
La propuesta se centra en la visión de un empresario que ha obtenido una gran escuela en términos de comercialización, conocimiento de proveedores y red de distribución. Loïc Florentin, en colaboración con su socio Timo Rajakoski, decidieron dedicarse a la industria mediante una propuesta inicial que colocaba a la marca buscando aficionados a los muscle cars.
De dicha visión se desprende el modelo Road Racer, mientras que en tiempos más recientes la visión ha cambiado para ofrecer complicaciones mecánicas y un excelso nivel de calidad inherente al conocimiento de los mejores proveedores de Ginebra, sede de la marca.
Su crecimiento ha sido vertiginoso, centrándose en regiones principales para la industria global de la relojería como China y Singapur. Actualmente su colección se centra en las piezas de Haute Horlogerie, en donde destaca un doble torbellino volante a 3 Hz con 72 horas de autonomía.
El Road Racer hoy da cabida a uno de los patrocinios más destacados firmados por la marca con el equipo de fútbol AS Mónaco, la línea Hedonia para dama y Hedonia fase de Luna que destacan por el gran trabajo de engastado y elaboración de sus carátulas. Y finalmente una pieza por demás interesante, Hedonia Jumping Meridian Time, mejor conocido como JMT, un segundo huso horario saltante de fácil manipulación con fechador incluido.
Reservoir
Entrevistamos a François Moreao, CEO y Fundador de la marca, un apasionado ex-banquero dedicado a los números, pero amante de los instrumentos de medición encontrados en los autos, aviones y submarinos. La firma basa su construcción estética en dichos artilugios centrados en la carátula.
Junto con sus socios: François Nakkachdji, François-Marie Neycensas y Guillaume de Bonvouloir, se han centrado en el crecimiento exponencial de la marca, su visión no es la de un par de cientos de piezas al año, desean alcanzar un número mucho mayor pero con crecimiento responsable.
La idea general es la de emplear un calibre base como el 2824-2 para dotarlo de módulos customizados, en los cuales se puede obtener la confiabilidad de un calibre tan robusto, pero la visualización única del tiempo de manera retrógrada, como funciona en un odómetro, por ejemplo.
En la colección iniciamos con la serie GT Tour, GT Tour Carbon y Supergarched y Supercharged RZ, disponibles en diferentes materiales que van desde un acero noble hasta una caja de carbono, pasando por una desarrollada en bronce. Estas referencias exhiben el paso de las horas saltantes mediante una apertura en la carátula en punto de las 6h, mientras que los minutos son retrógrados, ajuste que puede hacerse sin importunar al calibre hacia adelante o atrás, según convenga. Debajo de dichas indicaciones se encuentra destacada la reserva de marcha, cual si se tratara de un indicador de combustible.
Los modelos Longbridge, Longbridge Lady, Airfight y Tiefenmesser también forman parte de la línea y ofrecen un acercamiento más vintage. En el futuro podremos esperar adiciones a la línea Marine y a la aeronáutica, mientras que las opciones de correa que presenta son prácticamente inagotables: cueros, cueros perforados con hebilla simple o desplegable; correas de Nato de múltiples colores y Alcantara para algunos de sus modelos. Dicha marca también está nominada al Grand Prix de Horlogerie d´Genève en la categoría de Challenge por su modelo Longbridge British Racing.
Singer Reimagined
Una marca prácticamente nueva, pero que ya destaca por su originalidad y visión a futuro. Debuta con un cronógrafo que se ha ganado la nominación al GPHG 2018 en su categoría, se trata de una pieza finamente trabajada y que esconde la masa oscilante detrás de la carátula a fin de mostrar lo intrincado de su composición, su nombre es Singer Track 1 y lleva la firma de Jean-Marc Wiederecht, relojero maestro que ha trabajado para múltiples manufacturas y que es propietario de Agenhor.
Con espíritu californiano pero sello Swiss Made, la idea es modificar de manera intuitiva las grandes complicaciones mecánicas históricas. En este caso, el cronógrafo. Y producto del propietario y fundador Rob Dickinson, el diseñador Marco Borraccino y Wiederrecht, dotaron a este crono de 43 mm del calibre AgenGraphe, un motor que monta también el Fabergè Vissionaire y es producto de más de 10 años de R&D.
La visualización cambia de manera radical, es decir, la función del crono será primordial, mientras que el tiempo es secundario. Las horas y minutos se muestran en punto de las 6h en todo momento, los discos giran en sentido de las manecillas del reloj y ello pone en evidencia el momento del día. Mientras que el cronógrafo recibe toda la importancia al centro: totalizadores de horas, minutos y segundos, cabe destacar que el disco se ha graduado a 60 horas, por lo que el contador de 12 horas tradicionales aquí, es obsoleto. Finalmente, la pieza luce un acabado extraordinario para puentes, tornillería, ruedas y embrague y demás de Alta Manufactura.
Las 5 marcas nombradas encuentran similitud en que no han sido tomadas por parte de un punto de venta específico, ergo no tienen distribución-representación oficial actual en nuestro país.