Chronoswiss se concentra en lo esencial con el nuevo Flying Grand Regulator Skeleton Limited Edition, enfocándose en su carátula –apenas existente– y en el trabajo artístico de su movimiento esqueletizado.
El impresionante modelo se libera de todo material superfluo de manera innovadora, dando como resultado un reloj regulador multidimensional con un dial construido con base en los profundos conocimientos de la Casa en la esqueletización. A partir de ello emana un aura contemporánea muy singular que se extiende a un masculino tamaño de 44 mm de diámetro, gracias al cual destacan todas y cada una de las innovadoras líneas de la pieza. Además del lenguaje de diseño sin complicaciones, la coloración dinámica produce este efecto de transparencia y mecánica virtuosa.
La escala de hora –en forma de embudo– atrapa la mirada, mientras que el amor por el detalle y la delicadeza relojera de Chronoswiss, también se muestran en esta pieza relojera. Sin embargo, como en cada reloj regulador los minutos asumen protagonismo y, en este caso por partida doble, el minutero será marcado por la aguja central y por una adicional que lo exhibe con mucha mayor precisión de acuerdo a una graduación específica.
Respecto a su movimiento, recibe un detallado trabajo estético de esqueletización. El tren de rodaje puede ser visto en su totalidad, lo mismo que la liberación de energía que, a medida que cede su tensión, desencadena la maravillosa magia de la medición del tiempo. Puentes, platina y ruedas, exhiben una minuciosa labor de decoración artesanal para desatar un excepcional concierto de brillo y volumen.
Mecánica
Porta el calibre C.677S de construcción regulador y remonte manual. Dotado de 46 horas de reserva de marcha, la pieza vibra a 18,000 alternancias por hora e incluye un sistema de parada de segundos para un ajuste perfecto.
La última incorporación a la gama Flying Grand Regulator Skeleton Limited Edition está desarrollada para tan solo 30 afortunados coleccionistas en el mundo, de los que esperamos usted se convierta en uno de ellos. Se abraza al pulso gracias a una correa de piel de cocodrilo de Louisiana con cierre desplegable.