Una pieza tan singular como espectacular, se trata de una nueva creación de Alta Joyería desarrollada a partir del oro blanco, la madreperla, los diamantes y, obviamente la mecánica relojera de Jaeger-LeCoultre.
El concepto Duetto hace que esta pieza presente diferentes caras animadas por un mismo calibre, hablamos del 844, un movimiento mecánico de cuerda manual conformado por un centenar de piezas y dotado de una reserva de marcha de 38 horas.
Esta energía posibilitará la indicación de las horas y minutos, por agujas dauphine, en cada una de las caras de la pieza, propuestas en madreperla y laca negra. Un marco precioso de –250– diamantes baguette engastados a su caja de oro blanco de 18 quilates con acabados pulido y satinado. En total se cuentan 5.65 quilates del mineral más preciado de la Tierra, que hace que esta pieza se erija como verdadera estelar de la belleza femenina.