Las inspiraciones bélicas y de la aviación pueden ser la fórmula perfecta para el desarrollo de máquinas relojeras destinadas para lucir en la muñeca masculina de los hombres pero, ¿lo pueden ser también para las mujeres?
La respuesta es, sí. Y es que las líneas poderosas y cuadradas de las cajas de Bell & Ross, semejan un instrumento de a bordo de las cabinas de pilotaje con bordes cuadrados pero redondeados, de personalidad y carácter, pero que al mismo tiempo puede ser distinguido con una serie de códigos estéticos que destaquen la feminidad de la mujer que lo porta.
Los bordes achaflanados del bisel iluminan de forma sutil al acabado de la caja, mientras que la carátula de nácar llama poderosamente nuestra atención gracias a los reflejos grises y blancos que destellan por la originalidad de la idea, convirtiéndose en un icono de la feminidad que, adicionalmente, indicará el paso del tiempo gracias a las agujas de las horas y minutos y a una apertura en el dial para mostrar la fecha en punto de las 4:30 horas.
Animadas por el calibre de cuarzo de alta precisión y construcción suiza: BR-CAL.102, que dará vida al reloj de la mujer Bell & Ross, contemporánea, pero al mismo tiempo audaz, elegante y decididamente femenina. Por último, las piezas se ofrecen en caja de 39 mm de diámetro, sea de cerámica negra, blanca, acero pulido-satinado, todas están finamente terminadas, y se abrazan mediante pulseras de eslabones de cerámica, correa de caucho o satín, con hebilla de ardillón o cierre desplegable.
