Patrick Pruniaux, actual CEO de Ulysse Nardin ha sido anunciado como CEO de Girard-Perregaux, es decir, ahora comandará ambas firmas de alta relojería, sin dejar de desempeñar las actividades que tenía. Continuará reportando a Albert Bensoussan, Director Ejecutivo de Watches & Jewelry Activities de Kering.
De acuerdo al informe de Kering Group, la razón por la cual Patrick Pruniaux es apuntalado en sus responsabilidades es para buscar la transformación de sus expectativas, tanto en términos de comercio electrónico como de interacción digital.
El papel de Patrick Pruniaux será diseñar una estrategia coherente para acelerar el desarrollo de las dos marcas en los mercados internacionales, mientras que al mismo tiempo se mantienen sus características únicas, su capacidad de innovación y la excelencia de sus conocimientos.
Patrick Pruniaux ha pasado más de 20 años en las industrias de bienes de consumo y de lujo, y en el sector de la relojería en particular. Pasó nueve años en TAG Heuer y varios años en Apple, donde trabajó en el lanzamiento del reloj de Apple antes de convertirse en MD de Apple en el Reino Unido e Irlanda.
Estoy encantado de darle a Patrick Pruniaux la misión de aumentar la conciencia y acelerar el crecimiento de las dos emblemáticas Maisons relojeras suizas del Grupo Kering. El dinamismo que ha demostrado durante el año pasado como Director de Ulysse Nardin me convenció de que era la mejor persona para desarrollar estas dos marcas y capitalizar sus respectivas identidades, herencias y conocimientos tecnológicos. Albert Bensoussan, Director de Relojería y Joyería en Grupo Kering.
Kering Group
Es un grupo global de lujo que gestiona el desarrollo de una serie de marcas especializadas en moda, marroquinería, joyería y relojes: Gucci, Saint Laurent, Bottega Veneta, Balenciaga, Alexander McQueen, Brioni, Boucheron, Pomellato, Dodo, Qeelin, Ulysse Nardin, Girard-Perregaux. También cuenta con la división de gafas Kering Eyewear que trabaja en sinergia con otros Grupos, como Richemont. A finales del año pasado Kering empleaba a casi 29 mil personas y reportó ingresos por más de 10 mil millones de euros.