En esta ocasión Blancpain se viste de acero con el Villeret Quantiéme Annuel Steel, una de las referencias más apreciadas por los fanáticos de la Alta Relojería y de los viajes gracias a su mecanismo con calendario anual que solo requiere de un ajuste el último día de febrero para mostrar la fecha exacta, pues el resto de los días, el reloj pasa automáticamente del 30 o 31 al primer día del mes. Además, su segundo huso horario (GMT) facilita la estancia de los trotamundos empedernidos que buscan saber la hora en diferentes destinos.
Dentro de la carátula, la referencia exhibe un pequeño contador de 24 horas a la altura de las 8, mientras que la función GMT está asegurada por la hora central del reloj y vinculada con el fechador. A pesar de que esta referencia tiene un predecesor, la gran primicia que incorpora es el acero de la caja de 40 mm de diámetro que combina con su carátula blanca y su correa de piel negra para crear una pieza de estética contemporánea sin dejar atrás el estilo clásico y tradicional de la firma.
El calibre de carga automática 6054F es visible a través del fondo de cristal de zafiro que permite contemplar también la masa oscilante guilloché en oro amarillo –al igual que las agujas y los índices–. En su ingenioso sistema se colocan los correctores de las funciones bajo las asas para que los pulsadores queden fuera de la vista y que las correcciones se puedan realizar a mano sin necesidad de una herramienta especial.
El pulsador situado a la altura de la 1 permite modificar el día, mientras que el situado a la altura de las 5 horas permite corregir el mes. Por medio de la corona se puede ajustar la fecha y la hora del GMT. Para mantener este reloj en su sitio, se incorpora una correa de piel de aligátor forrado de alzavel, con una hebilla desplegable de tres hojas para garantizar el confort y ajuste a la muñeca.
