La relojería contemporánea exige una complicación que debería ser añadida a las características prácticas y básicas de todo reloj de acuerdo al mundo globalizado. Hace unos años Ulysse Nardin comenzó con el desarrollo de su relojería para convertirse a manufactura.
Inversión superior a 80 millones de francos y combustible horológico en la cuestión creativa, combinación que los ha llevado a entregar una pieza excepcional: de 7 calibres manufactura en los últimos tres años.
Hoy les presentamos el último de estos movimientos: UN-334, dotado de una sub-carátula descentrada para el “home-time”, que aparece mediante un disco de 24 horas y dos agujas de fácil lectura para el tiempo local o de destino. Una de las maneras más sencillas de controlar el tiempo en el que se viaja, pero que además permite un ajuste hacia delante o atrás con total facilidad, es decir, por medio de dos pulsadores. Igualmente, como la totalidad de los calibres manufactura de Ulysse Nardin está dotado de rueda de balance y espiral de silicio, tecnología que se replica en el escape.