No cabe duda que la conexión entre motor y relojería está cada día más fuerte, y es que haga el ejercicio y ligue algún automóvil que le agrade, clásico o conceptual, con la industria relojera; en la que también existe diseño vintage y contemporáneo, y se anima por un motor que late/trabaja al igual que un motor de combustión interna, o que sea híbrido e inteligente, y que además se ajuste a la muñeca mediante materiales vulcanizados como el caucho ¿ya lo imaginó? Chopard sí, desde hace varios años y le llamo Classic Racing, y dentro de este concepto: Mille Miglia, surgida en 1988 cuando Chopard decide auspiciar la emblemática carrera.
Un icono de la Casa recibe un rediseño que lleva por nombre Mille Miglia GTS, lo cual trasladado al idioma del alto octanaje se refiere a Gran Turismo Sport, por lo que un mecanismo con certificado de cronometría posibilita las informaciones de horas, minutos, segundos y fechador, pero además le dice a su afortunado poseedor cuánta gasolina resta en el tanque, bueno, energía en la cuerda que será armada de manera automática.
Ahora bien, la nueva colección se presenta en reloj automático con fechador, cronógrafo automático y reloj automático con indicador de reserva de energía, sobre el cual nos basaremos en esta ocasión, pues ha sido un calibre producido íntegramente en los talleres de Fleurier Ebauches, es decir, in-house. El mecanismo lleva por nombre 01.08-C, y tuvo como misión satisfacer la total calidad de la colección, es decir: valores de fiabilidad, robustez, autonomía (60 h) y control de cronometría certificado por el COSC.
Asimismo, su chasis está desarrollado en caja de acero inoxidable con carátula negra para rendir un homenaje a la estética de los automotores clásicos de los años 50, patrón que se ve resaltado gracias al indicador de la reserva en punto de las 9 h, mientras que la apertura a las 3 horas pondrá en evidencia el día del mes en el que se vive. Finalmente destacamos la tradicional correa de caucho con patrón de «dibujo» Dunlop tipo neumático de competencia, lo que le invitará a usted, estimado coleccionista, a presumir con sus amigos la clásica pieza de relojería automotriz que posee y porta con orgullo y precisión en la muñeca.