El diseño de esta pieza es magistral, atemporal y sencillamente inagotable… ha podido recibir diferentes materiales y es que es ideal para este propósito, por lo que su estética es camaleónica, tal como su peso y su belleza, lo que convierte al Oktopus en un reloj para gustos muy particulares, y también generales.
Se trata del primer reloj realizado en carbón de alta tecnología por parte de Linde Werdelin, mientras que al interior late un movimiento que late a 4 Hz durante al menos 44 horas, de hechura suiza de carga automática con sistema de indicación de fase de Luna patentado. Asimismo, su caja se extiende hasta los 44 mm de estética en multi capas, mientras que el color de la carátula esqueletada brinda una tridimensionalidad que juega a favor por la mecánica de la pieza, y que estará sujeta por una correa de caucho natural intercambiable –¿Su hermeticidad?– 300 metros, por lo que se complementará de manera excepcional con el estilo de vida del buceador o el aficionado al submarinismo.