La Grande Maison no podía faltar a la cita más importante de relojería para el Continente Asiático, una junta que en su segundo año cobra más fuerza, tendencia que continuará seguramente en la próxima edición, pero que para ésta ha despertado el interés de las máximas Casas para presentar ediciones especiales y nuevas referencias, dotándolas de la mayor calidad y precisión relojera.
Tal es el caso de Jaeger-LeCoultre, que mediante su colección Rendez-Vous nos lleva al extremo de la imaginación con Ivy Minute Repeater, una pieza engastada con diamantes y decorada con una hiedra que cobra vida en la carátula cubierta de minerales preciosos, exhibiendo los índices de las horas (3, 6, 9 y 12), al tiempo que se abraza a la muñeca femenina gracias a un strap de satín color azul.
Asimismo, el nuevo calibre 942a de remonte automático, anima a una pieza que late a la frecuencia de 4Hz, y que dotará al mecanismo de repetición de energía suficiente para la secuencia del repique, pero además entregará una autonomía de 43 horas de reserva de marcha. Concebido específicamente para adaptarse al diámetro de la caja –de 39 mm–, el motor detonará un timbre decididamente femenino, puro y cristalino gracias a los martillos de tropiezo patentados, que se encuentran presentes en el Hybris Mechanica Grande Sonnerie, pero también fueron instalados en esta pieza de excepción.
Asimismo, el Rendez-Vous Ivy Minute Repeater está dotado de un mecanismo que disminuye la perturbación del regulador a fin de clarificar el sonido de la repetición sin ningún tipo de «distractor», secuencia que además se activará gracias a un mecanismo de monopulsador con sistema de seguridad, contrario al tradicional accionamiento por gatillo.
Adicionalmente, engaste nieve para la caja de oro blanco destaca los trabajos de la alta joyería en las grandes complicaciones firmadas por Jaeger-LeCoultre, llevando el dígito de 548 diamantes dispuestos en la carátula –de oro blanco–, caja, cuernos, corona y monopulsador de la pieza.
En homenaje a los relojes para dama de los siglos XVIII y XIX, Rendez-Vous Ivy Minute Repeater es una pieza que obedece al arte y legado de La Grande Maison, la cual ostenta 180 oficios relojeros desarrollados bajo el mismo techo, confiriéndole independencia suprema y libertad de creación bajo un ambiente más que propicio, Le Sentier en el Jura suizo.
Finalmente, Jaeger-LeCoultre no perdió la oportunidad de presentar en Hong Kong su pieza estelar del año, que responde a la Edición Número 11 de la Colección Hybris Mechanica. Se trata de un reloj repetidor de minutos ultra-plano de carga automática con rotor periférico, que cuenta con un mecanismo de activación de la sonería “de seguridad”; se arma el repetidor al manipular un pequeño gatillo, pero para completar la acción se debe accionar un pulsador. Finalmente destacamos el –no menos importante– Duomètre Unique Travel Time, cuyo doble “pulmón” dotará de la suficiencia energética para la indicación de: horas, minutos, hora saltante (visualización digital) reserva de marcha para las dos fuentes, segundo huso horario con ajuste al minuto y mapa.