Una de las piezas más complicadas del Salon International Haute Horlogerie 2013, fue presentada por Richard Mille, y lleva por nombre: RM-039 Aviation E6-B Cronógrafo Flyback.
El reloj dedidado a la aviación: RM 039 Aviation E6-B proporciona prácticamente todas las informaciones presentes en la famosa regla de cálculo E6-B. Integrada en el bisel giratorio bidireccional, permite leer y calcular el consumo de combustible, los tiempos de vuelo, la velocidad en el suelo y la influencia de los vientos, y convertir rápidamente las unidades de medida (Naut/KM/Gallons/Liters/Feet/KG/LBS). Otra particularidad del RM 039 respecto a otros relojes de aviación es la posibilidad de calcular la altitud de densidad gracias a su pilar móvil situado a las 2 horas e integrado en el canto, una función inédita que el RM 039 introduce por primera vez en la relojería, cómo lo logra:
El RM 039 Aviation E6-B tourbillon, sumamente complejo y técnico, síntesis perfecta entre relojería y aeronáutica, es el instrumento perfecto para afrontar los retos a los que se enfrentan los pilotos durante los vuelos.
Son casi 750 componentes para el movimiento y más de 200 piezas para la caja, el RM 039 Aviation E6-B Cronógrafo Flyback forma parte del reducido círculo de los relojes más complicados del mercado.
Dada la extrema complejidad técnica del RM 039, Richard Mille deseaba un análisis más detallado de su utilización a diario y de su evolución con el paso del tiempo. Por tanto, durante varios meses, los ingenieros de movimiento Richard Mille y los relojeros de la casa APRP (Audemars Piguet Renaud et Papi SA) realizaron nuevos estudios con objeto de hacer evolucionar aún más el calibre RM039, cerciorarse de la excelente resistencia al paso del tiempo del movimiento y del perfecto funcionamiento del visualizador y de las funciones, sin dejar de lado algunas complicaciones y el propio concepto del reloj.
Los nuevos componentes, diseñados con los relojeros, permiten un montaje más rápido y más seguro.
Como la eficiencia es el resultado de un ajuste perfecto de los componentes por los relojeros, se les proporcionaron kits de ensamblaje optimizados que apenas necesitan reglajes. De este modo, aunque el ensamblaje del movimiento requiere una gran destreza, la puesta a punto es menos problemática.
Esta optimización también ha permitido mejorar las secuencias de reglajes de partida, de parada y de puesta a cero del cronógrafo, dado que este módulo está sometido a importantes exigencias debido a su doble función. En efecto, el diseño del módulo del cronógrafo flyback —con el visualizador de minutos y de segundos en el centro— permite, además de la función flyback, transformar la aguja de los minutos en descontador. Por tanto, no puede producirse ningún fallo en el funcionamiento del mecanismo, ya que se corre el riesgo de una parada completa del movimiento. Sin embargo, gracias a la puesta a punto de las secuencias de funciones del cronógrafo flyback, este puede soportar mayores márgenes de error en la manipulación, especialmente cuando el usuario presiona varios pulsadores a la vez o cuando la función flyback está en marcha y pulsa la función de descontador. Pero… ¿cómo? Gracias al aumento de los dispositivos de seguridad entre cada componente en movimiento. A partir de ahora, estas diferentes investigaciones garantizan un funcionamiento óptimo, con el paso del tiempo, del conjunto flyback/descontador, sumamente complejo.