La legitimidad de Oris en la relojería suiza no está a discusión; sinónimo de confiabilidad, innovación y diseño con carácter, Oris develó en su Depth Gauge de 2013 un ingenioso sistema posibilitado para medir la profundidad sin necesidad de incorporar una pieza móvil, y a partir de este momento, la línea continúa desarrollándose a fin de entregar el instrumento esencial para la práctica del submarinismo profesional.
Si bien en la actualidad los buzos profesionales calzan sobre su traje de buceo una computadora, la relojería mecánica funge como un instrumento de seguridad a toda prueba, y es que su fiabilidad es incuestionable aún en condiciones adversas.
Así pues, Depth Gauge de Oris marca un antes y después en la horología oceánica gracias a su ingenioso sistema de profundímetro, que consta de un orificio en punto de las 12 horas que conduce hacia un canal acotado cargado de aire que, a medida del descenso inherente a la inmersión del buzo, se comprime dando paso a que el agua que ingresa entre la apertura y el canal registre la profundidad a la que se encuentra el instrumento de manera fácil y clara.
Asimismo, esta pieza cuenta con una hermeticidad certificada de hasta 500 metros, lo cual brinda fiabilidad al movimiento de cronógrafo automático y fechador: Cal. 774 con base Sellita SW 500, un motor que latirá a una frecuencia de 4 Hz abrazado a su pulso mediante una correa de caucho color negro con anclaje de seguridad y cierre desplegable de rápido ajuste. Finalmente, el reloj se entrega en un set hermético que incluye brazalete de acero inoxidable y las herramientas profesionales necesarias para el cambio de correa/extensible sin necesidad de enviar a la manufactura o a su relojero.