Por primera vez en el Palacio de Hierro en Polanco, Cartier presentó Juste Un Clou, una de sus colecciones más representativas en la Alta Joyería. Bajo un concepto dinámico y cautivante, la marca francesa anunció la llegada de su joyería a este espacio predilecto por los amantes del lujo.
Los destellos provocados por el brillo de los diamantes engastados en la colección del clavo, Juste Un Clou, invitaron a todos los clientes a vivir una experiencia única. Con tres estaciones diseñadas para que los amantes de las joyas disfruten de un rico cocktail mientras ingresan a una cabina de fotografía en la que la música les dará el ritmo, Cartier dejó en claro quién es el rey de los accesorios más llamativos.
Con esta presentación, Cartier complemente su espacio relojero en el Palacio de los Palacios con sus diferentes colecciones de Alta Joyería de las que destacan: Juste Un Clou, Love y Écrou.
La colección del clavo: Juste Un Clou de Cartier
Las joyas siempre han sido los accesorios predilectos de las mujeres, sin embargo, no todas reúnen las características buscadas. Juste Un Clou de Cartier, coloquialmente conocida como la colección del clavo, es sin duda aquella que equilibra el glamour, distinción y dinamismo al mismo tiempo.
Creada en 1970 por Aldo Cipullo, la colección del clavo, Juste Un Clou de Cartier llegó para romper todos los estándares de la joyería tradicional. Desde ese entonces, la icónica línea de brazaletes, anillos y collares en forma de clavo, se convirtieron en el objeto de deseo del sexo femenino y masculino.
Tomando como inspiración un símbolo del quehacer industrial, el diseñador italiano decidió plasmar el poder que representa un clavo en joyería. Convirtiendo así, una apariencia “agresiva” en una totalmente anhelada.
Pasando por diferentes rediseños, Juste Un Clou de Cartier ha mantenido el brillo derivado del engaste diamantes dependiendo de la versión.
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