La Luna, mágica y misteriosa, ha sido musa inspiradora de A. Lange & Söhne dando origen a interesantes relojes con fase lunar. La colección de este año se presenta en una inigualable locación: “Cámara del Arte” en Dresde.
Al ser uno de los cuerpos celestes más evidentes, en Sajonia, sede de esta Manufactura, se han preocupado por estudiar el movimiento de su órbita y su influencia en varios ámbitos de la vida desde épocas inmemorables.
Augusto, el Elector de Sajonia, sentó las bases de la astronomía y la investigación lunar en el siglo XVI y dotó a Europa del primer gran aparato científico y ahora instrumento de colección: la “Cámara del Arte” en Dresde que fue la precursora del actual Salón de las Matemáticas y la Física, en el que se exhibe gracias al cercano vínculo del Elector con Guillermo IV de Hesse-Kassel, el reloj planetario de Eberhard Baldewein.
La Cámara del Arte de Dresde alberga más de 10,000 objetos de varias disciplinas científicas y ocupa siete habitaciones del palacio de Dresde. Este fue el escenario idóneo para presentar algunos de los modelos de la colección de A. Lange & Söhne de este año, dedicados a este fascinante cuerpo celeste de una manera especial. Los invito a conocer un poco más de estas piezas.
Richard Lange Calendario Perpetuo “Terra-Luna”. Después que Eberhard Baldewein había creado un reloj planetario para Guillermo IV de Hesse-Kassel, le fue solicitado por el Elector Augusto construir otro modelo para la Cámara del Arte. Con sus complejos cálculos y fabricación de un tren de engranes individual, con algunas partes asimétricas, Baldewein definió nuevos paradigmas en la relojería. La carátula pródigamente decorada del mecanismo lunar muestra no sólo la fase lunar actual sino también la relación de la Luna con el Sol así como su progresión a través de los cielos.
La carátula patentada de la fase lunar orbital en este reloj es también una innovación en el campo de la relojería ya que ofrece una precisión sin comparativo, muestra los cambios en la ubicación de la Luna en su relación con la Tierra y el Sol.
Gran Lange 1 Fase Lunar. En una de las secciones de la Cámara del Arte en Dresde luce un instrumento particularmente fascinante: una bóveda celeste elaborada en Augsburgo, fechada en 1587.
Tres carátulas sobrepuestas y varios anillos en circunferencia describen numerosos fenómenos astronómicos. La bóveda tiene 13 funciones diferentes, desde la imagen de un cielo nocturno y los horarios del amanecer y el anochecer hasta la indicación de la posición actual de la Luna.
La Luna creciente y menguante también pueden ser observadas con gran precisión al centro del círculo de las horas y los minutos del Gran Lange 1 Fase Lunar, nuevo modelo presentado este año.
Gran Lange 1 Fase Lunar. Un telurión (de la palabra latina Tierra, tellus) es una máquina planetaria que nos muestra la posición exacta y su relación entre la Tierra, el Sol y la Luna.
El modelo es ideal para explicar los cambios de estación, las fases lunares y sucesos relacionados con las constelaciones, como los eclipses solares o lunares. Además, la base funciona como calendario y permite conocer la posición del Sol, la Tierra y la Luna durante cualquier día.
El nuevo modelo del Gran Lange 1 Fase Lunar está disponible en oro amarillo, oro rosa y platino. Un proceso de revestimiento patentado para el disco lunar dota a esta complicación astronómica con una rica y detallada imagen.
Lange 1 Tourbillon Calendario Perpetuo. Nativo de Dresde, Ernst Fischer esculpió la cara visible de la luna con base en fotografías y observaciones personales. En el proyecto, dijo omitir el lado oculto a causa de la rotación sincrónica de la Luna, ya que el hemisferio visible desde la Tierra es siempre el mismo.
El modelo Lange 1 Tourbillon Calendario Perpetuo combina dos complicaciones clásicas. Gracias a la amplia distribución de las subcarátulas del calendario alrededor de los indicadores de la hora, muestra una gran cantidad de información claramente legible.