En el momento de su lanzamiento, en 1997, el Aquanaut causó sensación por su diseño moderno e inesperado, por su caja octogonal redondeada −inspirada en la caja del Nautilus−, y por su correa elaborada con un nuevo material compuesto ultrarresistente a la tracción y a los rayos ultravioletas: el caucho.
Para celebrar dos décadas de su reloj más dinámico, Patek Philippe ha intercambiado el acero por el oro blanco y el código de color negro por azul. Una verdadera edición de colección.
Este año es el vigésimo aniversario del Aquanaut, y para celebrar Patek Philippe ha creado la referencia 5168G. El primer Aquanaut estaba fabricado en acero inoxidable y con un dial negro, que hacía un excelente juego con un reloj deportivo casual. Sin embargo, los códigos cambian y este modelo también, gracias a una caja de oro blanco y una carátula azul profundo, como el océano.
Reinterpretación
Los tiempos cambian y las necesidades de la clientela son otras, es por ello que enlistamos las modificaciones que este Aquanaut ha incorporado 20 años después. De inicio, la caja se engrandece y la referencia 5168G tiene una caja de 42.2 mm hecha de oro blanco sólido, que contrasta con la caja de acero de 40 mm de la primera referencia (5167). Sin embargo, las proporciones y el estilo permanecen intactos, por lo que el cliente obtiene las mismas líneas y la misma mezcla de pulido en los bordes y el cepillado en la parte superior del bisel. Éste es el primer reloj de oro blanco en la línea Aquanaut, aunque tanto la primera referencia 5167 como la 5164 se ofrecieron en oro rosa. En cuanto a la carátula, se modifica el negro uniforme por un hermoso azul que se vuelve negro en los bordes.
Definitivamente esta tonalidad es hipnótica y nos invita a admirarlo de cerca. Conserva los mismos números arábigos en oro blanco y luce marcadores luminosos a juego.
El motor
Al interior late el calibre 324 SC, el mismo movimiento mecánico automático con tres manecillas y fechador que pudimos encontrar en la referencia original. Eso significa que con la caja más amplia, el calibre se verá un tanto más pequeño. No obstante, con sus 3.3 mm de altura, este movimiento es tan plano que incluso el reloj conserva un grosor muy razonable (8.25 mm).
El rotor central de oro de 21 quilates almacena eficazmente la energía, mientras que la tolerancia máxima de -3/+2 segundos al día garantiza una alta precisión. Los acabados del movimiento tampoco se quedan atrás, gracias a las franjas Côtes de Genève, los orificios moldeados y pulidos, los grabados dorados y las aristas achaflanadas y redondeadas que subrayan la forma de los puentes. El rotor de oro presenta una decoración perlada Côtes de Genève circulares y una cruz de Calatrava grabada, marca registrada de Patek Philippe.