Los genios se encuentran, ya sea en ideas, pensamientos y conceptos, no es casualidad que un buen escritor esté rodeado de grandes artistas, o un cantante comparta sus ratos libres con actores de teatro etc, en realidad los puntos en común de la gente virtuosa lo hacen empatar en intereses, como el de seguir creando.
Es así que HYT nace bajo el concepto de entregar una lectura diferente del tiempo gracias a una tecnología de laboratorio que posibilitaría la visualización por fluidos del paso del tiempo. De reciente creación, dado a que sus inicios datan del año 2002 cuando Lucien Vouillamoz decidió imaginar la idea de construir un reloj que incorporara líquidos y horología tradicional. Una utopía que necesitaba una solución mecánica posible, y que años más tarde, el –también– ingeniero nuclear especializado en termodinámica, decidiera replantearse en cuanto a la concepción inicial, añadiendo dos depósitos flexibles conectados al mecanismo, no obstante el proyecto e idea geniales, debían ser apuntalados por el financiamiento y experiencia de algún personaje decidido a hacerlo posible. Fue este momento de inflexión en el cual Lucien encontró en su amigo Patrick Berdoz a su socio perfecto, un emprendedor que posteriormente contactara a Emmanuel Savioz, cuyo dominio y experiencias en dicha tecnología al servicio de la medicina, fungieron como “mecenas” para el proyecto desarrollado durante un año y presentado en el 2010, había nacido HYT.
La idea es magistral, pero llevarla a cabo es sumamente desafiante, es por ello que se busco una primer solución para el H1 junto a Jean-François Mojon, y en el H2 se empleó la sabiduría y conocimiento de Giulio Papi, esto aunado a la buena dirección de Vincent Perriard como CEO, han llevado a HYT a ser una de las marcas con mayor potencia en la actualidad, pues su demanda sobrepasa la oferta de piezas que se pueden construir año con año.
Asimismo, dicho crecimiento ha requerido de un nuevo edificio de manufactura, asentado en el Cantón de Neuchâtel, junto a las orillas del lago, geografía que este 2014 da la bienvenida a un hombre cuyo nombre es reconocido por la totalidad del periodismo relojero: Dominique Renaud, quien fundara junto a Giulio Renaud et Papi.
Esta expansión estará asegurándose con base a la incorporación de elementos y mentes clave para preservar el futuro de la horología de los fluidos, y el papel de Mr. Renaud será el de Director del Departamento de Alta Relojería y proyectos especiales, lo que hace suponer que esta misma mecánica podría aterrizar a colecciones de entrada, o incluso superar la complejidad de las funciones que actualmente se leen en H1 y H2. ¿Se imaginan un fluido recorriendo el tourbillon? Bueno, quizá algún día, pero con la llegada de Dominique Renaud podemos suponer un alcance de estos tamaños.
CV Dominique Renaud:
–Graduado de la Universidad Nacional de Relojería de Besançon, de 1976 -1986 desarrolló movimientos para Audemars Piguet; 1986 funda junto con Giulio Papi Renaud et Papi SA; en 1989 funda Renaud Papi Claret SA en Le Locle, en 1992 Audemars Piguet invirtió en Renaud et Papi y fundó APRP; a partir del 2000 Dominique vende su parte de la compañía a Audemars Piguet y comienza proyectos individuales; en el 2013 continúa con Luiggino Torrigani de Dominique Renaud SA en el desarrollo de un laboratorio suizo de innovación. Asimismo y poniendo en contexto la innovación desarrollada durante el tiempo de Renaud et Papi, Dominique colaboró en el desarrollo de la sonería del IWC Grande Complication; en Audemars Piguet desarrolló el calibre más pequeño de repetición y el primer Grande Sonnerie Carillon; para Jaeger-LeCoultre colaboró en la materialización del micro-mecanismo de sonería para el reloj Reverso, mientras que para A. Lange & Söhne formó pieza clave en el Fusee Tourbillon; finalmente ha colaborado con Franck Muller en múltiples complicaciones.