No cabe duda que el famoso lema de Hublot –Art of Fusion– ha generado gran empatía con diferentes actividades y disciplinas alrededor del mundo. Y es que últimamente hemos sido testigos de ver como la relojería se conecta con algunas filosofías que conforman al mundo del deporte, la destreza, la música y la cocina.
Fue el viernes 1 de diciembre cuando la Casa Relojera dio a conocer una de sus visitas más exóticas y placenteras en el restaurante del chef Andreas Caminada en el pueblo de Fürstenau, una aldea en el cantón suizo de los Grisones, con motivo de reafirmar su alianza con el arte culinario.
¿Qué sería de la cocina sin la medición del tiempo para su cocción?
Para el éxito de esto es necesario tener la presión de los relojes Hublot y la exactitud y el buen sazón de Caminada. Por ello, la marca acompañó al chef en la elaboración de cada uno de sus platillos con algunos de sus relojes que se ajustaron a su muñeca con gran firmeza.
El Big Bang Unico Sapphire, Big Bang Ferrari, Techframe, el Magic Gold y el concepto All Black fueron algunos de los modelos que robaron las miradas de los asistentes mientras degustaban exquisitos alimentos inspirados en la esencia del Art of Fusion.
El talento, el espíritu, la determinación y la pasión, son algunas de las características que distinguen a Hublot y que al mismo tiempo se fusionan con la filosofía de uno de los mejores chefs del mundo.