La legitimidad entre la precisión suiza de Chronoswiss y el mundo del automóvil ha completado su más reciente colaboración luego de participar como Patrocinador Oficial del Kitzbühel, una competencia de vehículos clásicos que tuvo lugar en el paisaje alpino de Suiza por 29a Edición.
El evento contó con la participación de 187 vehículos que, pilotados por los más selectos entusiastas del deporte motor y el automobilismo clásico europeo, se disputaron el primer lugar tras 500 kilómetros de recorrido. Las difíciles carreteras sugirieron diferentes micro-climas, ascensos y descensos de montaña, agregando dificultad a cada uno de los trayectos.
Al término de la competencia un Mercedes-Benz 250SL Pagoda de 1967 culminó en lo más alto del podio. El bólido fue pilotado por Burkhart Müller y su copiloto Fabian Mohr. Chronoswiss celebró la destreza y su victoria entregando uno de los 29 relojes exclusivamente creados para la celebración número 29 del Rally Alpino.
Finalmente, Oliver Ebstein, propietario de la Casa Relojera tuvo oportunidad de competir a bordo de un vehículo histórico –Jaguar MK II de 164 hp– perteneciente a Gerd-Rüdiger Lang, quien no pudo competir en esta ocasión. La mecánica relojera y automotriz comulgan con los mismos valores de precisión, destreza y pasión por un instrumento decididamente masculino, que genera emociones como pocos instrumentos en la vida.