La cultura forma parte de la historia de Breguet, quien a partir de la creatividad de su fundador Abraham-Louis y de sus conexiones con la clase aristocrática, generó las mayores innovaciones en la Alta Relojería.
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- Los mejores relojeros de la historia
Con base en ello, Breguet colabora como expositor y mecenas de uno de los recintos más importantes del planeta, Petit Trianon, pero en esta ocasión se enorgullece en presentar una retrospectiva dedicada a María Antonieta y el castillo de Versailles.
Dicha muestra llegará a Japón este próximo 25 de octubre, y estará disponible hasta el 26 de febrero de 2017 en el renombrado Mori Arts Center Gallery de Tokio, capital nipona.
Todo inicia cuando Abraham-Louis Breguet decide viajar a Francia en busca de colocar sus inspiradoras piezas de relojería. En 1762 parte de su natal Suiza gracias a un buena migo suyo Joseph-François Marie, quien tenía grandes relaciones con la corte francesa. A partir de este momento se embarcó en una travesía de inspiración y creación monumental, mientras que por el lado de su clientela destacaba la figura de María Antonieta de Austria, archiduquesa de Austria y reina consorte de Francia y de Navarra.
Su taller fue creado en 1775 en la Paris’ Quai de l’Horloge, y 1782 recibió el primer pedimento por parte de la Reina, se trataba de un reloj con calendario perpetuo y repetición. María Antonieta quedó asombrada con el trabajo, recomendó a Breguet y continúo solicitando piezas.
Marie-Antoinette Grande Complication Pocket Watch
Guiada por un deseo verdadero y legítimo por la relojería de Breguet, había adquirido un sinnúmero de piezas del relojero, incluyendo un perpétuel. En 1783, uno de sus admiradores solicitó a Breguet y a su taller en Quai de l´Horloge, la pieza más espectacular de la época, a fin de entregárselo a la Reina. Las especificaciones mencionaban que tenía que ser construido en oro y debía contar con el mayor número de complicaciones. Además de esto, Breguet tuvo libertad total, no obstante la Reina jamás pudo observar el reloj, pues su construcción culminó en 1827. La referencia No. 160, mejor conocida como “María-Antonieta”, se convirtió en una leyenda, más cuando fue robado de un museo en Jerusalem y desapareció por décadas.
El Petit Trianon
Como parte de su deseo de contribuir a la conservación del patrimonio histórico y cultural europeo, Montres Breguet decidió apoyar el Castillo de Versalles por la reactivación de una finca que perteneció a María Antonieta y que ella adoraba: el Petit Trianon. Más que un lugar de residencia, un lugar especial, sofisticado donde la reina podría escapar del protocolo de la corte tedioso para disfrutar de sus pasatiempos y un estilo de vida más auténtico. La restauración apegada a los planos originales inició en 2007 y culminó un año más tarde.
María Antonieta, inspiración que permanece
En homenaje a la pasión de María Antonieta por las referencias relojeras de Breguet, en el 2009 se dio a conocer la línea de alta joyería “La Rose de la Reine”, que se inspira en la famosa pintura de María Antonieta con la Rose de Elisabeth Vigée retratista-Le Brun. Breguet vuelve a crear la famosa rosa sostenida en manos de la Reina utilizando camafeo, el arte italiano tradicional del sur de esculpir las diferentes capas de una concha con la mano. De igual forma “Les Volants de la Reine” rinde homenaje vibrante a los trajes usados por la reina de Francia. Presentado por primera vez en 2014, la gama asombra con la elegancia y la complejidad de sus formas, que recuerdan las sedas más finas y encajes plisados que adornaban los vestidos de la época.
