Vacheron Constantin anunció la apertura de su primera tienda en París, localizada, ni más ni menos que en el número 2 de la Rue de la Paix. Para celebrar este acontecimiento la marca decidió retomar su icónico modelo asimétrico 1972 y crear el 1972 Prestige.
Algunos relojes nacen con buena estrella y destinados a cambiar la historia. El modelo 1972 de Vacheron Constantin es definitivamente uno de ellos. El 23 de junio de 1972, en una suite del prestigioso Hotel Ritz, no muy lejos del número 2 de la Rue de la Pais, el Comité de France otorgó el premio Prestige de la France a Vacheron Constantin en tributo a la experiencia que le ha distinguido a través de los años y a su búsqueda constante de autenticidad, perfección técnica y elegancia y se convirtió con este acontecimiento en la primera manufactura relojera honrada con esta distinción.
Para celebrar este honor, la compañía ginebrina lanzó un reloj de apariencia innovadora con un diseño asimétrico que fue considerado atrevido para su época. Se hizo en una serie muy limitada, y el reverso estaba grabado el escudo de armas del Prestige de la France.
Metal precioso y la selección dorada
Hoy, nuevamente para celebrar un acontecimiento importante, como la apertura de su primera tienda en la Rue de la Paix, la marca retoma sus raíces y crea el 1972 Prestige. La pieza ostenta la misma elegancia y proporciones armoniosas del modelo histórico: el mismo tamaño y un movimiento mecánico de cuerda manual.
Al igual que todos los modelos de esta colección, el Prestige 1972 tiene un perfil curvado que reitera la carátula arqueada y cristal de zafiro. Para darle un toque muy sofisticado, el terminado en gris satinado de la carátula cuenta con sutiles motivos chevron acentuadas por dos agujas en oro de 18 quilates en oro rosa.
Un calibre legendario
Desde sus inicios, esta colección siempre ha utilizado movimientos mecánicos muy destacados. El nuevo 1972 Prestige no es la excepción ya que en su interior late el calibre 1003 de Vacheron Constantin, elaborado totalmente en oro desde 1952 y que mide solo 1.64 mm, aún un récord de delgadez en la industria.
El 1972 Prestige es sin duda una pieza excepcional, no por nada cuenta con el Sello de Ginebra.