Es fácil entender por qué el Pelagos FXD de Tudor empieza a ocupar un lugar cada vez más importante en las colecciones de la marca suiza. Se trata de un reloj idóneo para quienes gustan de los tool watches con una historia emocionante y un toque contemporáneo. El nuevo Pelagos FXD es un tributo a los relojes Tudor que durante décadas usaron los submarinistas de la Marina estadounidense. Como dice la firma, representa una versión moderna, de alto rendimiento y robusta del famoso «Milsub» (Military Submariner) del pasado.
Las claves históricas del Pelagos FXD
Tudor lanzó el primer Pelagos FXD a finales de 2021. Lo desarrolló en colaboración con los nadadores de combate de la Marina Nacional Francesa (Commando Hubert). La marca afirma que desde mediados de la década de 1950, sus relojes de submarinismo se ponían a prueba y se evaluaban por una serie de equipos dentro de la Marina estadounidense. En 1958, fueron adoptados oficialmente por la Marina. Se adquirieron y entregaron a los submarinistas que operaban en diversas unidades.
Como dice Tudor, el nuevo Pelagos FXD es el «sucesor espiritual» de esos relojes. Las siglas FXD se refieren a las robustas barras de correa fijas (FiXeD) de la caja. Según la firma, visualmente se asemeja más a un Tudor Oyster Prince Submariner de finales de la década de 1960, la referencia 7016. Tiene elementos de las especificaciones militares estadounidenses para relojes de submarinismo y detalles inspirados en otras generaciones de Tudor. Un ejemplo son los protectores de la corona de forma puntiaguda típicos de los primeros Submariners de la Casa.
El alcance de la relación entre Tudor y la Marina estadounidense es impresionante. Los relojes de la marca fueron usados por los equipos Tierra, Mar y Aire de Estados Unidos (SEAL) desde su puesta en marcha en 1962 hasta finales de los años 80. También se han utilizado para las funciones subacuáticas de los Equipos de Demolición Submarina (UDT) y los Seabees. Lo mismo ocurre con los instructores de las escuelas de submarinismo de la Marina. Y con la Escuela de Nadadores de Submarinos para el proceso de mantenimiento de submarinos en bases de Estados Unidos y el extranjero.
El nuevo Pelagos FXD
Como mencionamos, el nuevo Pelagos FXD es el heredero perfecto de esos relojes de Tudor, pero con cualidades que lo convierten en un producto de nuestra época. Para empezar, la caja de 42 mm es de titanio satinado, al igual que las barras de correa fijas integradas al cuerpo central. El bisel giratorio unidireccional de 60 muescas también está hecho en titanio y tiene un disco de cerámica y graduación de 60 minutos relleno de Super-LumiNova de grado X1.
La carátula es de color negro y ofrece una legibilidad inmejorable. Tiene los característicos índices cuadrados y las agujas angulares «Snowflake» que Tudor introdujo en 1969. Ambos cuentan con Super-Luminova de grado X1.
En cuanto al movimiento, lo impulsa el Calibre de Manufactura MT5602 automático con funciones de horas, minutos y segundos. El rotor troquelado en tungsteno monobloque está satinado con detalles pulidos a chorro de arena. Los puentes y la platina principal alternan superficies pulidas a chorro de arena y decoraciones láser. Tiene espiral de silicio antimagnético y certificación de cronometría del COSC. Y ofrece una reserva de marcha de 70 horas.
El detalle que terminó de conquistarnos es la correa de tejido verde bosque de una sola pieza con un hilo central rojo y sistema de autoagarre tipo velcro. Es fabricada en Francia en telares Jacquard del siglo XIX por la empresa Julien Faure. Asimismo, se entrega con una correa adicional de caucho negro de una sola pieza con motivo tejido en relieve.
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