El encuentro sucedió durante el primer día del SIHH 2018 de Ginebra, y en su booth rondaba el espíritu de Walter Lange, honrado hoy por la propia compañía de la manera más emotiva que pudiéramos imaginar. Además, destacaba el monumental reloj tradicional que funge como eje central de todas las operaciones de A. Lange & Söhne, no nada más en este Salon, sino históricamente.
Todo su quehacer empresarial gira en torno a sus productos, es por ello que en Lange no esperamos ver asociaciones de marketing que nublen la perspectiva de lo importante: el reloj. Así iniciamos nuestro primer acercamiento con el CEO responsable de la firma en la actualidad, uno de los hombres que ha dirigido por más años y de la mejor manera el mensaje de la relojería de Sajonia y, que con base en su expertise y visión, ha catapultado los talentos de su equipo, la familia de A. Lange & Söhne, hacia lo máximo de sus capacidades.
Watches World: Mencione por favor las áreas en las cuales se trabajó para el desarrollo de esta colección.
Wilhelm Schmid: Cada año buscamos dar respuesta a las diferentes necesidades que expresa nuestro público coleccionista. Cada año hay una conexión emocional, una búsqueda para entregar un poco de historia a partir de un reloj. La respuesta a ese sentimiento es precisamente el 1815 Homage to Walter Lange, del cual puedo decir que es el reloj que Mr. Lange siempre deseó que produjéramos. Desafortunadamente el negocio no era positivo, debido a que la complicación es sumamente costosa y requiere el desarrollo de un calibre complejo a un precio que no resulta competitivo. Sin embargo, tras su partida y durante el funeral, decidimos rendir un verdadero homenaje y cumplir este deseo. De las tres ediciones limitadas no habrá una más en el futuro. Es decir, jamás emplearemos este movimiento nuevamente y la singular pieza en acero será subastada a favor de una fundación de caridad enfocada en brindar ayuda a los niños. Una de las principales preocupaciones de Walter Lange era el futuro, las otras fueron la ciudad de Glashütte y la compañía misma. Por otro lado, siempre tenemos al comprador más racional, que desea adquirir una pieza práctica para verdaderamente mirar el tiempo a partir del pulso. Para él presentamos el Saxonia Outside Date con movimiento mecánico automático, gran fechador en punto de las 12 h y una lectura envidiable de las horas, minutos y segundos. En el lado femenino de la colección nos sentimos muy orgullosos de Little Lange 1, con una oferta de color sumamente atractiva y con el desarrollo de una carátula guilloché finamente trabajada con el sello de la Casa, que es nuestra carátula Lange 1. Contamos también con apasionados a la velocidad, y es por ello que nuestro Chronograph 1815 luce una carátula típicamente deportiva, con pulsómetro y mecanismo flyback.
WW: Cumple su octavo año en la firma, ¿cómo describe la evolución de la Casa relojera que comanda haciendo una comparación con aquel primer año?
WS: De manera interna he de decir que A. Lange & Söhne no cambia, buscamos ser una compañía consistente en todos los sentidos. Si usted se fija en la bienvenida que recibió cuando entró en el booth, la sonrisa que cada miembro de esta empresa exhibe en su rostro, eso no cambia. Pero también debo decir que hoy somos mucho más internacionales que en aquel momento, nuestra diversidad de producto es mucho más amplia de lo que fue; también somos más digitales que a principios de la década. Por lo que esos resultados son naturales en una empresa más madura que, si bien nace en el siglo XIX, se recupera hace menos de tres décadas.
WW: Durante estos años, ¿cuáles serían las tres principales acciones que usted ha llevado a cabo en la firma?
WS: La creación del nuevo edificio, la solicitud de la Gran Complicación y la repetición de minutos, además de la creación y apertura de boutiques a nivel mundial. Cuando llegué únicamente teníamos la que actualmente es nuestra sede, pero no es la más potente debido a su localización en Dresde. Si bien esto jamás será un esfuerzo personal, porque no es un show de un solo hombre, estos cambios serán recordados durante este periodo de tiempo.
WW: Triple Split…
WS: Debemos entender en principio la increíble complicación que hemos presentado en materia de relojes deportivos. Luego existen los cronógrafos con flyback, los rattrapantes y el doublé split, ahora el triple split. En A. Lange & Söhne dominamos los cronógrafos tradicionales, lo hacemos también con los mecanismos de flyback y al rattrapante lo denominamos Double Split, cuando lo presentamos en 2004. La razón era poder cronometrar eventos simultáneos con duración mayor al minuto. Con esta pieza podíamos medir la diferencia entre dos eventos simultáneos con espacio de 30 minutos. Sin embargo, luego de este periodo estábamos perdidos y es por ello que creamos el Triple Split, con el que podemos cronometrar eventos simultáneos con total precisión durante un espacio prolongado, tanto como 12 horas. Es ahora el único reloj que lo puede exhibir de manera mecánica, es único en su especie y por ello es tan especial.
WW: Hace un par de años preguntamos a Walter Lange respecto a su complicación favorita, su respuesta fue que era el cronógrafo. Hicimos lo propio con Anthony de Haas, Director de Producto y la respuesta fue la misma. Hoy le preguntamos a usted…
WS: (nos interrumpe)… Lo mismo pasa conmigo. El cronógrafo siempre ha sido una complicación fascinante. Antes de mi llegada a Lange era un coleccionista, hoy soy un coleccionista y aun cuando mis primeros relojes no eran en su totalidad de esta marca, la mitad de éstos eran cronógrafos.
WW: Usted proviene de diferentes industrias, particularmente de la industria automotriz (BMW), ¿qué tipo de aprendizajes se pueden aplicar de ésta en la relojería?
WS: Hay muchos procesos que pueden facilitar la gestión o mejorarla dentro de una empresa. Al final los cambios residen en el producto y uno puede buscar ser más eficiente a partir de un departamento de Recursos Humanos bien establecido, control de producción, exportaciones, etcétera. Sin embargo, lo que es diferente es trabajar en la escala de una empresa como BMW y llevar y aplicar esa experiencia a una más particular y exclusiva como lo es A. Lange & Söhne, es más personal, menos de momento y con mayor flexibilidad.
WW: En cuestión de empresa y de la situación actual de la relojería ¿cómo cerró el año pasado?
WS: Fue un año retador, sin duda prácticamente para toda la industria. Sin embargo, podemos decir que el sol salió todas las mañanas y que lo seguirá haciendo. Cerramos mucho mejor de lo que iniciamos, por ello 2018 tendrá grandes noticias hacia el futuro.
WW: Por último, y hablando de estos retos, globalmente no han sido años récord para la industria, ¿cuáles son los desafíos en estos momentos?
WS: En años complicados hay muchas marcas que cambian de ritmo y de visión su mensaje y lo que saben hacer mejor. Esto sucede porque el jardín del vecino siempre luce más verde, por lo que la tentación de dejar de hacer lo que uno hace es cada vez mayor. Mi consejo y estrategia es seguir haciendo lo que sabes hacer y perfeccionarlo, tomando en cuenta la adaptación a un nuevo entorno y ambiente. Lo ilustro tomando el ejemplo del ascenso libre: tres puntos de contacto sólidos y uno libre para buscar el siguiente nivel. Mi misión a cargo de la compañía es mantener esa estabilidad, no nos podemos quedar en el mismo lugar, definitivo, pero tampoco podemos apresurarnos a subir el siguiente escalón.