Damiani nace en Valenza Po en 1924 de la mano de Enrico Damiani, en el corazón del barrio italiano conocido mundialmente por la calidad de su orfebrería. Su habilidad como maestro orfebre, lo convirtió, en poco tiempo, en el joyero al que acudían las grandes familias de la época para la realización de piezas únicas. La pasión por este trabajo fue heredada por su hijo Damiano Damiani quien impulsó a la marca en una época de florecimiento industrial.
Hoy esa pasión sigue viva en manos de la tercera generación de los Damiani, quienes la han convertido en una empresa con presencia internacional. En 2007 se consolidó como una de las empresas Made In Italy más prestigiosas cotizando en la Bolsa de Milán.
Damiani y el amor a una profesión
En entrevista con Valentino Baiardi, Regional Director Americas, pudimos conocer más de esta marca que transforma los diamantes y las piedras preciosas en verdaderas obras de arte, piezas que son muy apreciadas en el mercado mexicano, caracterizado por su profundo conocimiento y aprecio por el trabajo de calidad.
“Para Damiani el mercado mexicano es sumamente importante e interesante, incluso cuando no habíamos iniciado con la distribución, los mexicanos que viajaban a Italia se sentían atraídos por nuestras colecciones que despertaban su interés por el tema de la manufactura del diseño. El cliente mexicano reconoce la calidad y el diseño porque lo ve en todo el mundo.
“Conforme fuimos expandiendo nuestra presencia a nivel internacional con una distribución mucho más estructurada –ya tenemos 70 boutiques en ciudades como París, Londres, Roma, Milán, Tokio, Dubai–, empezamos a trabajar con clientes mexicanos. Ya tenemos una subsidiaria aquí en México, tenemos tres boutiques monobrand en Polanco, Santa Fe y Querétaro, y obviamente trabajamos con los más importantes distribuidores como Peyrelongue Joyas, que es un líder en el sector de la venta de alta joyería”.
Las colecciones Best Seller de Damiani
El mercado de la alta joyería está globalizado eso ha permitido que las piezas que se encuentran en Tokio, Italia, París o Dubai estén igualmente presentes en México y concentradas en sus colecciones Best Seller como Belle Epoque (la más vendida de la marca en todo el mundo), Margherita, Mimosa, Absolute, Emozioni, Animalia, por mencionar solo algunas.
Pero ¿de dónde proviene la fuente de inspiración para los creadores de la marca? Baiardi nos explica: “La inspiración siempre viene, en gran medida de la historia de Damiani pero ha tenido una evolución que responde básicamente a las necesidades y gustos de las mujeres. Nuestro cliente ya no es solamente el hombre que elige un regalo para la mujer, es ella misma la que nos marca la pauta e incluso tenemos joyería para caballeros. Por ejemplo, nuestra colección Mimosa, que es un árbol típico de Italia, se regala el 8 de marzo para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, esa es ahora nuestra fuente de inspiración”, explicó.
Damiani es la única empresa del mundo que ha recibido 18 Diamonds International Awards, los Óscar mundiales de joyería. A estos reconocimientos, se añaden otros muchísimos premios entre los que se encuentran dos Tahitian Pearl Trophy, un Haute Couture Design Award, un Vogue Joyas, diversos premios en el ámbito empresarial y otros tantos en el de la comunicación.
La importancia del trabajo artesanal
Sorpresivamente en la pandemia, el mercado y la demanda de la joyería creció sustancialmente lo que ha llevado a la marca a enfrentar nuevos retos ya que prácticamente la totalidad de sus procesos son manuales: “Aumentó la demanda, pero nuestra producción lleva sus tiempos y eso no puede cambiar para conservar la calidad. Nos dimos cuenta de la necesidad de promover el oficio. Abriremos en los próximos años un nuevo Headquarter donde tendremos un museo e impulsaremos aún más nuestra escuela. Ya la tenemos, y a ella acuden estudiantes de joyería de Italia y todo el mundo.
“Es un oficio muy complicado y hermoso desde mi punto de vista, pero hay que promoverlo, hay que guiar a los jóvenes que están regresando a tomar este oficio como una profesión para toda la vida. Es muy importante tener una mano de obra calificada”, destacó Valentino Baiardi.
Por supuesto que como parte de su evolución como marca Damiani ha integrado a sus procesos la más avanzada tecnología: “Antes se diseñaba todo a mano, hoy en día se hace con un software en una computadora, pero siempre el primer concepto es a mano. La alta joyería es todo manual. Está claro que la tecnología como los microscopios, los hornos, etcétera, ayudan a la producción, sin embargo, el engaste, corte, pulido y colocación sigue siendo un proceso artesanal y manual”.
La importancia del aspecto social en las empresas de joyería
Más allá de la innovación de materiales, el diseño, la calidad y el prestigio, siempre hay que estar atentos a la parte social y ética. Damiani sigue un estricto código ético de no explotación en el trabajo.
La familia Damiani ha querido impulsar un proyecto internacional a favor de poblaciones africanas, comprometiéndose para ofrecer ayuda concreta a las personas que viven cerca de las minas de diamantes. A partir del verano de 2011, con el proyecto “Clean Water”, en apoyo de la asociación Drop in the Bucket, Damiani ha financiado la construcción de más de 70 pozos de agua. También crearon “Damiani for Japan”, con el fin de reunir fondos para apoyar a las mujeres de las áreas afectadas por el terremoto y el tsunami de 2011, intervenciones de apoyo a las poblaciones italianas afectadas por los terremotos en Emilia-Romaña e Italia Central y ayuda tras el terremoto de Nepal.
Creo que las razones de nuestro éxito son una marcada identidad, una gran habilidad manufacturera y un diseño original, todo ello impulsado por una gran pasión”.
Guido Damiani