Basilea, Suiza.- El impresionante recinto, diseñado y transformado por el afamado despacho Herzog & de Meuron, hoy cierra sus puertas después de 8 días de intensas actividades, en él se llevó a cabo la 41.a edición del show que se ha consolidado como el evento de relojería y joyería más grande e importante del mundo.
Expertos, compradores, distribuidores y fanáticos de la alta relojería tuvieron la oportunidad de conocer de primera mano las innovaciones presentadas en exclusiva por los 1,460 expositores de 40 países, 380 de ellos suizos. A lo largo de esta semana llegaron 122,000 visitantes –17% más que el año pasado– y 3,610 periodistas internacionales, cifra 9% superior a la de 2012, lo que habla del interés que despierta este evento a nivel mundial.
La extraordinaria infraestructura que ofrece el nuevo recinto lo convirtió en un espacio más cómodo y funcional para cerrar negocios; muchas de las marcas renovaron y crearon nuevos booths, verdaderas boutiques concepto que derrocharon lujo, originalidad y alta tecnología.
¡El “Swiss Made”, más fuerte que nunca!
Pudimos observar impresionantes movimientos mecánicos, automáticos y manuales. El énfasis claramente se dio en las complicaciones: tourbillones, repetidores, calendarios perpetuos, sonerías… muchos de ellos inspirados en la fantástica herencia relojera de la que gozan gran parte de las manufacturas.
Esperamos que hayan disfrutado de la cobertura que el equipo de Watches World realizó durante estos días y por supuesto, en las próximas semanas seguiremos presentándoles las novedades develadas en Baselworld 2013.
¡Tenemos una nueva cita del 27 de marzo al 3 de abril de 2014!