Como fieles y constantes promotores del Swiss Made en Watches World no podíamos dejar pasar este día: el Swiss National Day. El 1 de agosto es para los suizos lo que el 4 de julio para los estadounidenses o el 16 de septiembre para los mexicanos. Hace poco más de un siglo que se celebra, sin embargo, apenas desde 1993 es un día feriado para los suizos.
El 1 de agosto 1291 fue la fecha en la que tres cantones alpinos –Uri, Schwyz y Unterwalden– llevaron a cabo el denominado juramento de la confederación, acto que se constituyó como la fundación de una Suiza ya independiente del gobierno austriaco.
Poco más de 700,000 ciudadanos suizos viven más allá de sus fronteras, lo que según la Federal Statistics Office, equivale al 10% de la población total, estimada en más de seis millones de personas.
En la actualidad, este país cuenta con representaciones diplomáticas en 197 naciones: 54 de ellas en África, 49 en Europa, 44 en Asia, 20 en Centroamérica, 15 en Oceanía, 12 en Sudamérica y 3 en Norteamérica. En cada una de ellas se lleva a cabo una celebración; desde Central Park en Nueva York y hasta Cancún, Quintana Roo.
Las festividades en el Swiss National Day
Las celebraciones por el Swiss National Day comienzan desde la noche del 31 de julio con espectáculos pirotécnicos y se extienden a todo el 1 de agosto, día en que el país entero se reúne en lugares públicos alrededor de fogatas, escucha los discursos acerca de la independencia del país de los gobernantes de Austria y realizan barbacoas en el jardín o el almuerzos en las granjas.
En ningún otro lugar de Europa hay un día nacional que se celebre de una manera tan intensa.
Cada comuna suiza arma su propia fogata y pone en marcha los fuegos artificiales, y los niños desfilan por las calles con faroles de papel –a menudo decorados con la cruz suiza o los símbolos de los cantones– y la gente enciende velas en sus ventanas.
Y puesto que no hay celebración está completa sin una fiesta, muchas personas aprovechan este festival de fuego para cocinar salchichas en una barbacoa y disfrutar con los amigos.
Pero en los últimos años una fiesta alternativa ha ido ganando en popularidad: Almuerzo en la granja. La idea fue lanzada en 1993, como una iniciativa de la Asociación Suiza de Agricultores.
Los visitantes se sirven productos frescos de granja y con eso tienen la oportunidad de ver algo de la vida de los agricultores. Más o menos participan 430 granjas y se sirve almuerzo a cerca de 200,000 personas.
En Watches World, celebramos el Swiss National Day a la distancia y refrendamos nuestra admiración por una nación que ha logrado extender su saber hacer en muchos rubros, especialmente en el de la relojería, el que nos apasiona.