Cuando un artista de la talla del italoamericano comienza su etapa madura, el tiempo que ha vivido le sirve de experiencia para apreciar lo verdaderamente especial en el mundo, y así como en su rol profesional histriónico y cinematográfico, su vida diaria está llena de simbolismos y detalles que exhiben una personalidad de genio, de un ganador al Oscar, Emmy, Globo de Oro, SAG, BAFTA, AFI y Tony.
Falta recordar su papel como Tony Montana en Scar Face, su incomparable «Padrino» encarnando a Michael Corleone, o su Coronel Slade en Perfume de Mujer, para darnos cuenta de la dimensión de su carácter y temperamento cameleónico.
Pero basta de breviario y presentemos al nacido en Nueva York un 25 de abril de 1940, que estuvo presente como cada año en el Festival Internacional de Cine de Venecia. Pacino, fiel a su extensa cultura relojera, vistió su pulso con Jaeger-LeCoultre: Deep Sea Vintage Chronograph y Master Ultra Thin Réserve de Marche. Dos magníficas piezas coincidentes con sus últimas cintas: The Humbling y Mangelhorn.
Al Pacino y Jaeger-LeCoultre
Su relación se remonta a la juventud del actor, que ya disfrutaba de piezas de la Grande Maison para su colección, no obstante, a partir del 2011, Pacino fue reconocido con el Jaeger-LeCoultre Glory to the Filmmaker Award derivado a la calidad de dirección que ha desarrollado el multipremiado actor.