Montblanc nos tiene ocupados con cada uno de sus lanzamientos, y qué gusto nos da escribir de una línea tan bien desarrollada y pensada. Como es su costumbre, más allá de la calidad en cada uno de sus productos, ese toque de innovación en comparsa con la tradición es inherente a sus líneas de artículos, mismos que usted conoce pero se los recordamos: relojes, joyería, artículos de escritura y piel.
En este caso, una de sus mejores ejecuciones es la línea de peletería, de la que se desprende un tratamiento de piel que lleva por nombre Sfumato, y que se inspira en el arte de la pintura sfumato, que consiste en realizar una patina que degrada el color de manera elegante y llena de clase.
Tamponato
Si bien conocíamos la belleza de Sfumato, la novedad en esta última colección recibe una aplicación denominada Tamponato. La cual proporciona una superficie opaca a la piel de becerro mediante coloraciones que van del gris al café y destacan con un llamativo azul petróleo, que tanto ha gustado en los últimos años.
Describiendo un poco del proceso que recibe la piel, previamente seleccionada dentro de la mejor materia prima. Se aplica un proceso de lavado con agua y vapor a fin de embellecer el grano natural de la piel y hacerlo más resistente contra las arrugas. Luego de un proceso de secado se pinta de manera artesanal a mano con una esponja en diferentes tonos, dando como prioridad un tono más oscuro ocn el fin de crear un suave efecto denominado «Tamponato».
Esta colección es bastante nutrida, pues luce 19 bolsos y 22 billeteros, además de accesorios de bolsillo que presentan adiciones como la costura triangular y el forro en alusión a la serpiente, uno de los símbolos de la Maison y de sus orígenes.
Estos instrumentos facilitarán la vida del ejecutivo que desee portarlos. Ya que se ha pensado en los compartimentos y los cierres apegándose a nuestros tiempos. Su tecnología será resguardada por este increíble proceso de peletería florentina.
