Una de las conexiones más emblemáticas entre la relojería deportiva y el deporte de la velocidad y los motores, se escribe al igual que el nombre de un país que puede presumir al mismo tiempo de ser un brand name. Me refiero a Mónaco, comúnmente asociado con la exclusividad, el lujo y la competencia más conocida de Fórmula 1. Pero, de igual manera podemos encontrar un número importante de coincidencias y líneas convergentes entre la ciudad de Mónaco y la firma con sede en La Chaux-de-Fonds. Sin duda la herencia de las carreras y el mundo de la velocidad de TAG Heuer se encuentra directamente ligado al GP de F1 celebrado cada año en El Principado, pero no solo el espíritu racing fusiona a esta sociedad, es por ello que te compartimos algunos datos que soportan dicho concepto:
– TAG Heuer se asocia con Automobile Club de Monaco (ACM), organismo que supervisa la carrera más glamorosa del automovilismo.
– La primera marca de relojes en auspiciar a un piloto profesional (Jo Siffert, 1969).
– La marca cuyo reloj, colores y prominencia protagonizaron “Las 24 horas de Le Mans”, junto al gran Steve McQueen (1971).
– La primera marca de relojes en asociarse con una escudería que participaba en los Grand Prix (Ferrari, 1971 – 1979).
– La marca de relojes con mayor presencia en el podio de Mónaco (15 victorias) como parte de la sociedad más duradera de la Fórmula 1 (28 años, desde 1985 hasta hoy, con Vodafone McLaren Mercedes).
– Fue Cronometrador Oficial de la Fórmula 1, con una precisión de milésimas de segundo (1992 – 2003).
– Cronometrador Oficial de la Indy Racing League, con una precisión de diezmilésimas de segundo (2004 – 2006).
– El Socio Oficial del Gran Premio de Mónaco junto con el Automobile Club de Monaco (ACM) (2011 a la fecha).
Ahora bien, regresando a su liga directa con la colección homónima de TAG Heuer, este año presume de un motor no solamente confiable, sino que incorpora un sistema de protección a los golpes avanzado, que suspende al mecanismo gracias a cuatro brazos amortiguadores recolectores de las vibraciones externas, disipando la energía hacia un compuesto que la absorbe, por lo que también está certificado por el COSC, todo ello gracias a una elevada frecuencia, casi cardiaca, de 5 Hz ¡¡¡36,000 alternancias por hora!!!