WW-PRIMAVERA 2012. Presentada por primera ocasión en 1992, La Grande Classique de Longines debe su refinamiento extremo a la prestigiosa colección “Agassiz” lanzada diez años antes y cuyos modelos -fabricados en oro- rendían homenaje al fundador de una casa que ese año celebraba su 150 aniversario. Desde entonces, esta colección se ha convertido en el símbolo de la elegancia clásica de la firma y ha conquistado corazones alrededor del mundo.
La Grande Classique de Longines encarna la más antigua tradición estética de la marca. Fiel a sus características originales, luce actualmente en las muñecas de aquellas personas que saben apreciar los valores eternos.
Los modelos de la colección han sido fabricados en acero, en PVD amarillo o rosa, o incluso en una alianza de acero y PVD, lo cual atrae tanto a las mujeres como a los hombres.
La Grande Classique despliega múltiples facetas con carátulas en color blanco, gris, negro lacado, o incluso nácar blanco; las cuales han sido adornadas con números romanos o diamantes. La refinada pieza también hace gala de su atractivo carácter extraplano: apenas 4.20 mm para los modelos de cuarzo y unos sorprendentes 7.05 mm para la configuración equipada con movimiento automático. El distinguido diseño de la pieza le confiere la categoría de una serie atemporal, elegante y exclusiva.
La Grande Classique
Referencia: L4.741.0.58.2
Movimiento: L420 de cuarzo
Funciones: horas y minutos
Caja: 33 mm de acero inoxidable / Cristal: zafiro
Carátula: negra lacada, 12 diamantes Top Wesselton como indicadores / Bisel: 64 diamantes Top Wesselton (0,537 quilates) / Agujas: rodiadas
Correa: piel de cocodrilo en color negro
Hermeticidad: 30 metros.