Seguro tú también conoces a uno, o probablemente, este artículo te interese puesto que eres uno de ellos. Los seres humanos, desde un inicio, fueron considerados nómadas, personas que debido a las condiciones de clima, falta de alimento y diversos factores, se veían obligadas a mudar su lugar de residencia continuamente. Finalmente y con el descubrimiento de la agricultura, la gran mayoría decidió establecerse en un mismo sitio, mismo que les proveía de seguridad y en el cual podían emprender un proyecto de vida. Pero curiosamente, no todos comulgan con este estilo de vida, y para ellos Girard-Perregaux tiene contemplado lo siguiente…
La colección lleva el viaje en su nombre «Traveller», el del trotamundos que hace malabarismos con los husos horarios. A imagen de sus dos modelos – un cronógrafo con indicación de horas del mundo, y un fases lunares, gran fecha y reserva de marcha – Traveller viaja con el tiempo, con su tiempo. La colección se nutre del savoir-faire de antaño para descubrir mejor las horas de hoy, parte a la conquista del mundo, aquí o allá, sigue los minutos que transcurren. Vive intensamente cada acontecimiento, porque el viaje ofrece a quien gusta de apreciar el tiempo que pasa ese tiempo sobre el que nadie puede influir.
Traveler fases lunares y gran fecha
Fabricado en acero, su caja se compone de 30 elementos qu alternan sutilmente decoraciones satinadas y brillantes, su carátula opalina –ligeramente esférica–, favorece la lectura, mientras que los índices, prolongados por una plataforma de materiales luminiscentes apuntan al centro, dirigiendo su mirada a lo importante, la hora y la fecha.
GIRARD-PERREGAUX Traveller Fases Lunares y Gran Fecha // Caja: 44 mm de acero y acero con cerámica / Movimiento: mecánico automático / Calibre: 13 ½ ’’’ / Frecuencia: 28,800 alternancias por hora / Reserva de marcha: 46 h / Funciones: horas, minutos y segundos; gran fechador; indicador de fases lunares e indicador de reserva de marcha / Correa: aligátor negro y segunda configuración, piel color marrón
Traveller ww.tc
Inspirado por legítimo pasado, la nueva configuración se instala en la cúspide de los relojes de viajero por excelencia, que iniciaran a partir del relojero ginebrino Louis Cottier en 1935, quien desarrollara un sistema capaz de indicar el tiempo de acuerdo a los 24 husos horarios existentes.
El desafío estético ha consistido en representar los meridianos sin que alteren la lectura del tiempo. Bordeado por un anillo en el bisel que indica las ciudades del mundo y por el disco 24 horas día/noche, la esfera enarbola la fecha en una ventanilla a las 2h. El contador de 30 minutos y el pequeño segundero ubicados a las 9h y 3h, respectivamente, destacan gracias a una decoración opalina azurada. La ventanilla 12 h apuesta por la sobriedad a las 6 h, hasta fundirse en la escena. Puntuando la lectura, los índices se realzan a partir del material luminiscente empleado. Sin embargo, una de las características más importantes del conjunto se ubica a las 3 h, estamos hablando de la corona, que ajusta el conjunto de la siguiente manera: la primera posición dirige el índices de las ciudades, la segunda la fecha, la tercera la hora y minutos y el anillo de las 24h. Innovador, original y práctico, este sistema ofrece al reloj una utilización reflexiva para una comodidad en el porte diario.
GIRARD-PERREGAUX Traveller ww.tc // 44 mm de acero o acero y titanio, o acero con bisel de cerámica / Movimiento: mecánico automático / Calibre : 13 ’’’ / Frecuencia: 28,800 a/h / Funciones: horas, minutos y segundos; horas universales; indicador día y noche; cronógrafo y fechador / Correa: caucho recubierta con aligátor negro o marrón de acuerdo a la configuración de su preferencia.
