El espacio nutre de inspiración para la creación de los relojes femeninos de la Casa. Y en esta ocasión Bell & Ross enriquece sus piezas estelares con una colección de modelos femeninos de espíritu igualmente celeste. BR S Novarosa, seductor y glamoroso, está inspirado en el color rosa de las supernova, aquellas estrellas que explotan en el vacío sideral.
Tres versiones dan vida a la colección, las cuales retoman la caja del BR S, el más pequeño de los relojes cuadrados. El diseño reinterpreta el modelo icónico de la Casa con un preciosismo que deleitará al público femenino. El soberbio color rosa de la carátula recuerda al de las estrellas supernova*, cuya explosión libera un intenso e impactante halo rosado. Estos modelos son auténticas joyas relojeras.
El corazón
Un movimiento de cuarzo que muestra las horas, los minutos, los segundos y la fecha. Este mecanismo apuesta por el confort de uso y el aspecto práctico; por ello, estos relojes son perfectos para el uso diario. La caja de acero, de diseño muy depurado, se inspira en la emblemática forma de la familia BR y en la instrumentación aeronáutica: un “círculo dentro de un cuadrado”. Se enmarca dentro de la colección BR S, la de formato más reducido, ideal para la mujer. Las piezas poseen hermeticidad de hasta 100 metros, mientras que la caja está destacada por pulidos y cepillados que se distinguen gracias a su concepción bien balanceada. Finalmente, el bisel de las versiones engastadas cuenta con 66 diamantes, de talla redonda, que suman un total de 0,99 quilates.
Ya sea que su gusto sea discreto y se incline por el esplendor de la carátula soleil, el acero y una correa de piel color gris, o desee índices diamantes que se acompañen de brazalete malla milanesa de acero, o prefiera destacar su feminidad mediante índices y bisel engastados con diamantes y correa de piel de aligátor rosa, estas tres piezas brindarán un statement de diseño inspirado en la tendencia de la mujer actual: poderosa e independiente.
*¿Qué es una supernova?
Ésta se produce cuando alcanza la última fase de su evolución y comienza a brillar con una intensidad asombrosa antes de estallar en una nube de polvo. El resplandor es tan poderoso que puede llegar a abarcar una galaxia entera, que es un conglomerado de hasta 100,000 millones de estrellas.