El espíritu deportivo y racing de la Swiss Avant-Garde se vive –igualmente– en las profundidades oceánicas… Una de las líneas más importantes de la casa relojera fundada por Edouard Heuer en 1860, da la bienvenida a otro buzo de la relojería, hermético hasta los 500 metros y poseedor de un look dinámico, tradicional e igualmente elegante que deportivo.
Dotado de un mecanismo de cronógrafo calibre 16, su estética presenta una extraordinaria combinación de colores: negro y tratamiento luminiscente para sus marcadores, mientras que una caja y brazalete de acero inoxidable pulido y cepillado, confieren robustez a la muñeca del buzo que se atreva a portarlo. La tan necesaria válvula de helio para las inmersiones a bajas profundidades está situada en posición de las 10, mientras que sus totalizadores aparecen a las 12, 6 y se completan a través del pequeño segundero a las 9 horas.