La legitimidad de Corum en el mundo de los deportes acuáticos no tiene duda, su conexión con el mar y con las actividades competitivas que requieran de instrumentos de precisión y que garanticen una fiabilidad extrema, forma parte del ADN de la Manufactura con sede en La Chaux-de-Fonds, Suiza.
Gracias a dicha herencia y –también– a la colaboración que mantiene con los prestigiosos marineros Loïck Peyron y Ben Ainslie, Corum decidió realizar un calibre equipado con función regata, pero y esto ¿qué significa?
Dicho deporte demanda una mecánica de altos vuelos, si es que la relojería pretende brindar una medición confiable, debido a que debe disponer de una función de salto y cuenta atrás regulable de los 0 a los 10 minutos, que además debe mostrarse por una abertura en la carátula para garantizar una legibilidad perfecta, además de incorporar la función cronógrafo, que deberá ser capaz de cronometrar el mayor número de horas de competencia, y que en el caso específico del novedoso Admiral´s Cup AC-One 45 Regatta, alcanza una docena (de las mismas).
Dicho mecanismo permite al competidor definir su posición –de cuenta atrás– gradualmente y en cualquier momento entre el primer y último disparo antes de una carrera. Este cronógrafo late a una frecuencia de 28,800 alternancias por hora, es decir a 4 Hz, cuyo calibre C0 040 se encuentra albergado por una caja –de 45 mm– fabricada en titanio grado 5 con acabados pulidos y satinados, e inserciones con tratamiento PVD negro. Dicha “coraza” es completamente hermética hasta una profundidad de 300 metros, y por si fuera poco, hace gala de un fondo de cristal de zafiro para que su afortunado poseedor tenga la posibilidad de admirar el movimiento.