Poco más de cinco décadas han pasado desde que Singapur fuera reconocido como Nación independiente, 9 de agosto de 1965, y a partir de ese momento su crecimiento económico, social y cultural ha sido exponencial.
Es por ello que su importancia como mercado para los bienes y artículos de lujo es máxima, y una marca como Cartier no podía faltar en la ecuación.
Etourdissant, deslumbrante o asombroso en la traducción al español, una dualidad de conceptos inherentes a la construcción de este tipo de piezas, cuyo “buque insignia” es el collar homónimo hecho de platino, además de un brazalete de nombre Diamas, que reinterpreta el oficio de Maison con este mineral.
Piezas clave: Etourdissant necklace, composición armónica integrada por diamantes en corte geométrico montados en platino que, además puede vestirse en dos configuraciones, una en unifila con la piedra central de 34.96 quilates, o completo añadiendo dos filas más; Andaman necklace, de platino, zafiros, perlas y diamantes. Dotado de una piedra central de 44.47 quilates en talla cojín color “royal blue”, dotado de perlas y brillantes para un conjunto espectacular; Agra necklace, zafiros, rubíes, onyx, esmeraldas y diamantes montados en platino mediante la firma Tutti Frutti de Cartier; Diamas, hecho mediante la complejidad métier d´art de Cartier en cuanto al tratamiento de diamantes, logrando un engaste completamente diferente al tradicional, prácticamente invisible; Cisela, un collar de oro, diamantes y zafiros, cuya técnica revive la manera ancestral de portar ornamentos en Grecia. Se inspira en los broches de la Maison de los años 20-30.