Como “una historia de amor” es como Laurent Lecamp, Director de Relojería de Montblanc, ve a la manufactura Minerva, hoy, bajo su estrategia, un gran conocedor de relojería, que ha llegado a la Casa con una renovación muy importante, no ha dejado de avivar la historia, producir innovación, atesorar la gran relojería y hasta ser parte de los equipos que hoy lleva creaciones que inclusive listan nuevos patentes.
“Soy un gran fan de Minerva. Desde el primer día que entré a la Manufactura sentí que esto se iba a convertir en una bella historia de amor. Pero no es una relación fácil, tiene sus altibajos, tienes que luchar por ella”.
Laurent Lecamp es un ejecutivo apasionado de lo que hace, lo mueve la emoción, pero su grandiosidad es que le pone disciplina y rigurosidad, así, la estrategia ha caminado de manera impecable creando desde un reloj sin oxígeno en su interior, hasta inspirarse del mismo mar de hielo del Montblanc, tanto que no volveremos a ver una carátula de Montblanc sin reconocerla y ahora de la historia de Minerva con la cual trabajar y hace más viva y única que nunca.
Watches World (WW): ¿Cómo ha tomado a Minerva desde su ingreso a Montblanc?
Laurent Lecamp (LL): Cuando entré en la empresa, sabía de Minerva, pero mis conocimientos no eran muy profundos. Supe que había que aprender sobre muchos aspectos. Aprendí mucho de los libros: tanto en aquéllos de mucha antigüedad, como en los más recientes sobre Minerva, para entender cómo era hace 100 años. Al leer uno de estos libros, algo llamó mi atención: el invento del bisel estriado en 1927 creado con el propósito de usarse en los relojes de piloto. En el bisel que inventaron, como el del Red Arrow, cuando lo giras, tiene una flecha que se puede mover simultáneamente. Pero también puede realizar una función. Los pilotos, cuando empiezan a volar, pueden poner la flecha en 0 y así saber cuánto tiempo dura su vuelo, lo cual resulta muy útil, porque cuando vuelas, no te fijas cuánto tiempo has estado volando. Pero es importante regresar al aeropuerto, porque el combustible podría ser un problema y en aquella época los instrumentos de vuelo no eran tan fiables. El reloj era un elemento clave. También podían adelantar el reloj en el tiempo, y así, si empezaban a volar a la 1, ponían la flecha en 20, y sabían que cuando era la 1:20, había que hacer un plan para regresar a tiempo. Se utilizaban de esta manera.
Lo desarrollaron en 1927, solicitaron una patente el mismo año, después, a finales de los años veinte y en los treinta, este concepto fue desarrollado por Minerva, y otras marcas llegaron y desarrollaron el mismo concepto.
Nos quedamos con la idea y elaboramos el Red Arrow el año pasado. Este año quiero profundizar en el concepto aún más. Decidimos conservar este bisel estriado que fue inventado hace 90 años, añadiendo un concepto de los movimientos que tenemos en Minerva, los movimientos de fabricación propia.
La esencia de Minerva
Cada calibre debe ser ensamblado y desensamblado dos veces. En Minerva buscamos tener tan solo un relojero detrás del movimiento, el cual debe ensamblar la pieza de principio a fin. Quiero ofrecer al relojero la posibilidad de conocer al cliente final, y que el cliente final pueda conocer al relojero, para cada pieza de Minerva producida. Es algo único para la gama alta, para todos los calibres de los relojes en la industria relojera.
Ahora, algunos clientes finales nos dicen que tal acercamiento les encanta, pero quieren que un cierto relojero sea su relojero para siempre, lo cual es muy interesante.
Una clienta de la marca, una gran coleccionista, dijo que conocía a un relojero y quería que él desarrollara un reloj para ella, según su idea. Este es el aspecto emocional que creamos.
En lo personal, cada vez que hay visitas a la Manufactura, ahí estoy para conocer a nuestros clientes, ya sea para tener un lunch o para cenar juntos. Creamos un club de 58 miembros clave, son nuestros 58 clientes top en todo el mundo, este club es para ellos. La idea es única, porque cada dos meses realizamos una actividad con ellos. El día de hoy tenemos una cena con ellos, por cierto. También creamos relojes específicos para ellos. Los miembros del club tienen acceso a 58 piezas cada dos años, pueden decir sí o no. Cada movimiento se desarrolla solo para ellos. Puede imaginar los costos.
La nueva dirección de Minerva
Esta es la nueva dirección de Minerva, la cual queremos seguir. Todo esto lo implementamos y funciona extremadamente bien. Además, intentamos unir diferentes elementos del pasado, lo cual abarca al bisel estriado, nuestros movimientos clave, el cronógrafo monopulsador. Desde 1911, desarrollamos los cronómetros que podían medir un quinto de segundo; en 1912, un décimo de segundo; en 1916, aumentamos hasta una centésima en tres segundos. En los Juegos Olímpicos de Alemania de 1936 fuimos nombrados el cronometrador oficial. De esto está hecha Minerva. In 1966, en el Formula 1 Grand Prix, Minerva nuevamente llegó a ser el cronometrador. Nuestra historia de cronometraje es tal, que es fundamental retomar a Minerva y mostrar al mundo de qué estaba, está y estará hecha.
WW: Ha ido más allá con el significado, la historia y la naturaleza, háblenos de la nueva caja.
LL: Permítanme presentarles el primer concepto. Creamos el primer acabado en la industria relojera sin involucrar seres humanos o máquinas; solo la madre naturaleza. Estamos desarrollando una caja con un revestimiento negro. En una caja, se agrega 80% de piedra del Mont Blanc y 20% de piedra caliza de un bosque cerca de Villeret, conocido como La Combe Grède con montañas en forma de V. Y después la sacudimos durante varias horas. Al final, tenemos esta caja elaborada utilizando únicamente las piedras, gracias a un proceso de pulido natural.
De esta manera, conectamos el concepto de Montblanc, implementado con un glaciar, con las piedras de la montaña, con Minerva. Nuestro mensaje es muy claro: alpinismo/montañismo. Es único y su éxito es magnífico. A los clientes finales les encanta el concepto.
Adentro, tenemos un bisel estriado de 1927, la inspiración, en oro blanco, un revestimiento negro con el acabado de Minerva utilizando las piedras. En el reverso de la caja tenemos el grabado de la Manufactura Minerva como era en los veinte, y podemos notar el movimiento invertido adentro.
Hace dos años, estuve en casa, vi a mi hija de 3 años observar mi reloj. No comentó nada sobre la esfera de Minerva, pero cuando vio la parte posterior dijo: ¡Wow, papá, eso es bonito! Al ver esto, me dije que llegó la hora de invertir el movimiento, y revelarlo al mundo. Para ahora, el movimiento ya tiene 95 años. Entonces, tan solo invertimos el de 1929. Al darle la vuelta al movimiento, vimos que era necesario desarrollar una serie de componentes adicionales para que todo funcione apropiadamente. Es importante prestar atención a esto.
Para desarrollar este reloj, tenemos un relojero a cargo, la pieza tiene 273 componentes, hecho a mano, las manecillas y los índices externos con SuperLumiNova. Esa es la historia. Tenemos 88 piezas.
WW: ¿Cuándo van a empezar a venderlo?
LL: A partir de ahora, en un precio de 40,000 euros.
WW: ¿Cuál es la capacidad de Minerva para el día de hoy? ¿Cuántos relojes pueden producir?
LL: La capacidad es un gran tema. Si me baso en la demanda, deberíamos aumentar drásticamente la capacidad. Pero aún queremos mantenerla como está. Si vas demasiado rápido, puedes perder tu alma y nosotros debemos conservar la nuestra. Minerva nunca ha dejado de operar desde 1858. Muchas marcas desaparecieron en los setenta. Pero hay algo mágico detrás de Minerva. Siempre tuvimos más o menos el mismo número de personas en la marca, lo cual es interesante. Creo que todo es mágico. Podemos incrementar la producción ligeramente, pero después la tendríamos que limitar.
Desde que lanzamos el nuevo concepto, los artículos son extremadamente buscados, pero es imposible satisfacer a todos los coleccionistas. Tampoco es nuestra meta.
Buscamos coleccionistas clave, no alguien aleatorio que compre solo una pieza, sino que los que deseen internarse en el mundo de Minerva, y eso es lo que esperamos con las nuevas colecciones también. El club está lleno, por ejemplo, cuenta con 58 miembros. Pero nosotros nunca lo promocionamos. El primer miembro del club habló con el que se convirtió en el segundo, y así es como se unieron.
WW: En los puntos de venta, ¿vemos algunos relojes de Minerva?
LL: Muy rara vez, porque normalmente se van muy rápido. Intentamos tener unos relojes Minerva en las boutiques clave, pero normalmente las boutiques reciben las solicitudes, y los relojes no se exhiben. La solicitud se manda a mí, a mi equipo, la analizamos, así es como funciona.
WW: Digamos, ¿no los tienen en las vitrinas?
LL: Quizás a veces, pero normalmente no los ven por un largo tiempo. Tan solo en ciertas boutiques específicas, pues no tenemos suficientes piezas para todas en el mundo. Es altamente exclusivo. Pero, es exclusivo no desde el punto de vista de marketing, sino que debemos respetar la capacidad con la que contamos.
WW: A la misma velocidad con la que producen los relojes, deberían producir a los relojeros. Las personas envejecen, por lo que es necesario formar nuevas generaciones.
LL: Precisamente. El elemento clave es la educación.
Estaré en México en septiembre para reunirme con muchos clientes finales, también para explicar los productos. Los coleccionistas siempre se nos acercan con muchas preguntas. Debemos proporcionarles información precisa. Por ejemplo, uno de los clientes me preguntaba cuándo fue exactamente que tramitamos la patente para el bisel estriado de Minerva, por ejemplo. Fue a finales de 1927, en noviembre. Lo sé porque lo estaba estudiando. Pero para estas preguntas difíciles, es necesario estar ahí para compartir con ellos esta información.
En otra ocasión, hablamos sobre el movimiento del Pitágoras, desarrollado en 1948. Explicamos que un ingeniero estaba detrás de este proyecto, hablamos sobre su proporción áurea, el 1.618. La sesión de preguntas es como un ping pong.
Las preguntas de los coleccionistas son extremadamente consistentes y ayudan a desarrollar el siguiente movimiento. Vemos qué es lo que les encanta, lo que preguntan. Aprendo mucho de las pláticas con mis clientes, sin duda.
WW: ¿Cuántos modelos fabrica Minerva en estos momentos?
LL: Es un secreto. A todo el mundo le gustaría saber. Son unas pocas centenas cada año, una cantidad muy limitada. Fabricamos algunas piezas a pedido. Estos relojes tardan entre 8 y 12 meses en elaborarse. Algunas piezas tienen el costo de hasta 250,000-300,000 euros. Acabamos de lanzar una pieza de 300,000 euros. Compartimos el dibujo con los coleccionistas y se agotó, tan solo tras mostrar los dibujos.
Ahora, después de Watches & Wonders, comenzamos a ensamblar las piezas y trabajamos los movimientos, pero necesitamos muchos meses para producirlos. En Minerva, lanzamos todo con antelación, porque sabemos que en los próximos 12 meses se venderá todo. Por eso, comenzamos hace unos meses en términos de la producción y ensamblaje de los relojes, porque sabemos que a veces nuestros clientes tienen que esperar hasta 2 años. Así que comenzamos incluso antes de presentar los productos, para que lleguen a tiempo al mercado.
WW: Lleva mucho tiempo en el mundo de la relojería. ¿Dónde situaría a Minerva en el ranking de las manufacturas en la historia del siglo XX?
LL: Mi respuesta probablemente lo decepcionará, porque le diré que está fuera del ranking. Le diré por qué. Cuando visita Minerva, todo, incluso los escalones, es lo mismo que al principio, cuando se fundó la Manufactura. Tenemos el piso, los mismos diez cuartos que estaban desde hace más de 100 años. Cuando visita Minerva, no ve a los relojeros detrás de los cristales mientras hacen su trabajo, ellos trabajan de la misma manera que lo hacían hace 100 o 150 años.
Minerva es magia y no lo quiero cambiar. Minerva es como una máquina de tiempo. Cuando visita Minerva, ve cosas y puede imaginar que está a principios del siglo XX. En 1998 o en 1905 se veía exactamente igual. Para mí es una parte mágica. Todos los clientes que nos visitan comentan que nunca han vivido esta experiencia en la industria relojera, y es cierto. Todo es único, es un pueblo pequeño.
Ahora estamos planeando implementar nuevas actividades para los clientes. Organizaremos un almuerzo al aire libre en la naturaleza, enfrente de la Manufactura, con fondue y raclette, para compartir esta experiencia con nuestros clientes clave. Esto es una nueva Minerva. Queremos desarrollar la parte emocional también. Ya tenemos la parte técnica, el savoir faire, el know-how, la tradición. Lo que ofrecemos es único. Tenemos un queso específico en la ciudad, creado en nuestro pueblo, por cierto. Y ahora tenemos una actividad que involucra este queso, lo cual es otro know-how específico.
En este momento, me gustaría presentarle otro concepto, bastante loco. Pero si no estuviéramos locos, no pasaría nada en este mundo. Es hora de volverse loco. Parece ser el primer cronógrafo en el mundo sin los pulsadores. En la historia de la relojería, nunca se ha desarrollado algo así. Tenemos la SuperLumiNova, una esfera azul muy específica, el movimiento en la caja se basa en el de 1920. Tiene 100 años, ensamblado y desensamblado a mano, dos veces. Tan solo tiene a un relojero detrás del proyecto, a quien puede conocer. Siempre es la misma historia.
Aquí alrededor tenemos las fechas clave, empezando desde 1858; 1887, cuando desarrollamos el nombre de Minerva y la flecha de Minerva; 1908, cuando desarrollamos el primer movimiento cronógrafo para los relojes de bolsillo; 1912, cuando protegimos el diseño de la forma de V, 1920, 1927, 1929, etc. Tenemos el aniversario de 100 años, porque fue desarrollado en 1920 y su lanzamiento fue en 1923. En realidad, tiene 103 años. Pero podemos decir que su historia comienza una vez que es lanzado.
En 1927, el bisel estriado; en 1929, los famosos movimientos; en 1948, el movimiento del Pitágoras; en 2003, son los movimientos clásicos desarrollados en los veinte, en los cuales trabajamos con nuevos acabados. En 2023, lanzamos por primera vez el primer cronógrafo en el mundo sin ningún pulsador para activar el cronógrafo. El mecanismo está dentro del bisel. En este momento estamos solicitando tres patentes en Suiza.
Este cronógrafo es una pieza obligada para un coleccionista porque es nuevo y nadie lo esperaba. Tiene un vínculo con Minerva, su bisel estriado. Ya era hora de combinarlos. Es un savoir faire increíble para el calibre. Cada vez que da un giro de 6 grados, viene la siguiente función y así sucesivamente, y allí, se detiene y la función se encuentra asegurada.
WW: Tiene las funciones de iniciar, detenerse, reiniciar.
LL: Solo trabajamos la función de iniciar. Solo se inicia una vez en la vida, y luego funciona para siempre.
El reloj luce un bisel estriado en oro blanco, el mecanismo se encuentra adentro. Tiene la función de inicio, pero no tiene el pulsador, así que no puedo hacer la función de detenerse. Lo hago con el bisel.
Para mí, la idea era clara: quería tomar del pasado lo que podría utilizar, combinar todos los elementos e intentar crear algo único. Estaba orgulloso de Minerva y quería que Minerva volviera ya. Debemos mostrar al mundo que nuestros movimientos son únicos, nuestro concepto es único y está patentado, y estamos de vuelta en la carrera. Es una producción extremadamente limitada. Para el negro, el costo es de 40,000 euros con tan solo 88 piezas. Para el crono con el bisel y sin pulsador el costo es de 45,000 euros. Y, la edición en oro lima es de 60,000 euros.