Mucho se habló de que Baselworld dejaba la mitad de sus participantes, que muchos contratos se acababan y que otros más ya no podían renovar su lugar en la exposición y como en otros lados lo he dicho, es de lo mejor que le pudo pasar a Baselworld para el visitante, el expositor y al “Swiss Made”. En una balanza, mientras más marcas van a Ginebra, lo cual resultó en una gran experiencia, este año, la misma grata ocasión se vivió en Basel cuando en realidad el enfoque fue a las manufacturas tradicionales, a las que generan casi todo el valor relojero y que desarrollan, investigan y crean, atesoran la historia del desarrollo relojero suizo. Una con más expositores y otra con menos, no podíamos vivir mejor año como visitantes e interesados de la relojería, algunos de los cambios paulatinos que ha vivido Baselworld no solo han sido físicos con la nueva gran sala de expositores, sino también lo que el visitante recibe en esta pequeña ciudad frontera con Alemania y Francia, enriquecida por las vistas de su gran rio, arquitectura y cultura.
En los años de renovación del edificio y algunos anteriores, cuando hasta había que viajar a pabellones externos en autobuses, el visitante tenía largos trayectos y servicios que en mucho eran los más costosos por pertenecer a las fechas de una de las dos ferias más famosas de visitantes de alto perfil, ésta –la relojera– y ArtBasel.
Este 2018 fue un parteaguas y grata experiencia viendo cómo la comunidad relojera, manufacturas, joyeros y distribuidores de todo el mundo tuvieron otro panorama.
Cuando menos, es más, los cambios positivos:
1
El visitante relojero ha enfocado su tiempo a los relojes como un bien acabado y con menos displays ha dedicado su visita a las marcas que más aportan con el “Swiss Made” o joyería sin distraerse en otros bienes como plumas o proveedores de la industria. Sin duda, un beneficio para las manufacturas bien establecidas y con el potencial de estar dentro de Baselworld.
2
Reservaciones de hotel y servicios de hospedaje con mucho mejor capacidad y disponibilidad, más cerca.
3
Servicios de restaurantes más accesibles. Quiere una cerveza o salchicha en la plaza central, la media hora de fila es cosa del pasado. Los usuales hacinamientos que duraban horas afuera de la expo o filas interminables para comprar algo de comida dentro han desaparecido, enfoque al visitante y calidad en su experiencia.
4
La renovación de los taxis y su competencia con UBER, ha dejado más conveniencia al visitante.
El tranvía con muy pocas excepciones en horarios de la estación en la plaza de la feria en hora de salida se vive mucho menos problemático y las colas han bajado sustancialmente, “Todos arriba” nadie se queda por exceso de pasaje.
5
En esas mismas horas pico de entrada y salida de la feria se siguen haciendo filas, pero el nuevo sistema de entrada y lectores nuevos de códigos ha resultado más ecológico, en la mayoría de los casos más rápido, en algunos por ser impreso en un papel en casa no han podido contar con credencial y ser un poco más difícil de encontrar o leer.
6
Aunque los precios de famosos restaurantes no han bajado, sí el poder contar con reservaciones, lo que ha generado mucho mejor valor apreciado por lo que se paga.
7
El periódico diario ha dejado de existir impreso, mucho más oportuno recibir la información en el móvil pues no era nada práctico cargarlo por todo el expo, otra vez, enfoque a la calidad de la visita.
8
Hasta la experiencia en el aeropuerto ha sido mejorada y la accesibilidad de vuelos en el caso de Watches World fue de mucha más disponibilidad.
9
Se comprobó que en este caso menos, es más, la mitad de menos empresas ha resultado en el doble de comodidad para el visitante en todos sentidos. Hasta en las celebraciones nocturnas de relojeras, han podido ser mucho más grandes y más cercanas a la exposición.
10
El mensaje ha quedado claro y transmitido con fuerza, la prensa no ha bajado su asistencia y con más tiempo por marca, ha podido llevar muchos más mensajes de las manufacturas, grupos y marcas, presentes y sus innovaciones. De hecho, el centro de prensa como lugar de reunión nos pareció lleno total en la mayoría de los tiempos libres.
