Page 67 - Impreso
P. 67
...................................
Las técnicas artesanales dan vida a la alta relojería, son una pequeña rebelión contra
lo efímero, son un recordatorio de que el tiempo no solo se mide: también se siente, se
observa y se admira. Quien lleva en su muñeca una pieza con estas características no
solo porta un reloj, sino un fragmento del alma de quien lo hizo.
..................................
La alta relojería no se trata solo de medir el tiempo,
también es un lenguaje silencioso, una forma de arte
donde tradición, tecnología y dedicación convergen.
Entre engranajes, carátulas y complicaciones,
sobreviven técnicas ancestrales que elevan cada pieza
a la categoría de obra maestra. Algunas marcas han
apostado por mantener vivo ese savoir-faire tan difícil
de alcanzar, e incluso, por combinar más de una técnica
en cada pieza, algo que va más allá de la precisión: es
legado y emoción.
A continuación, un recorrido por algunas de las
técnicas más bellas y complejas que todavía hoy
embellecen los relojes de excepción.
Engaste: el brillo del exceso medido
En el engaste pavé, decenas –a veces cientos– de
piedras preciosas diminutas se colocan tan juntas que
el metal casi desaparece. La superficie se convierte en
un tapiz de luz que parece flotar. No hay espacio para el
azar: cada gema debe colocarse con extrema precisión
para lograr un efecto uniforme y deslumbrante.
Existen variantes, como el micropavé, aún más sutil.
Pero todas comparten algo: la destreza del joyero y la
obsesión por el detalle.
El Cartier Panthère necesita un savoir-faire preciso, en particular
para la labor de lacado, que se aplica a mano, así como para el
engaste nieve de la carátula con 145 diamantes talla brillante, más
314 diamantes talla brillante y 86 espesartinas en el brazalete. Más
de 110 horas de trabajo.
El Bvlgari Serpenti Aeterna en oro rosa está adornado con diamantes
que iluminan la carátula con engaste nieve, extendiéndose a lo largo
de la espina dorsal hasta la punta de la cola. En la versión de alta
joyería en oro blanco, las gemas de gran tamaño.
Breguet Tradition Seconde Rétrograde 7035 ostenta una carátula
guilloché de esmalte grand feu azul translúcido y tintado, el
mismo azul intenso que el segundero retrógrado y los tornillos de
acero azulado.
WATCHES WORLD
65

